Minutos después de entregar la Medalla de Extremadura a su padre político (Ibarra) y pocas horas antes de cenar con Zapatero, con un mar de números como aperitivo, Guillermo Fernández Vara se sienta con EL PERIODICO en su despacho de Mérida para analizar su primer año de gobierno. Siente que los días han pasado rápido desde su victoria electoral, de la que pasado mañana se cumple un año. "Mi sensación es que he cumplido lo que le prometí a los extremeños", asegura.

--Carmen Rodríguez es un ama de casa de Cáceres que hace un año le pidió a través de EL PERIODICO que se preocupara por crear empleo, ya que entendía que era la necesidad más acuciante. ¿Tiene la sensación de haber defraudado a mujeres como Carmen?

--Ya me dijo mi hijo cuando llegue a mi casa el día que ganamos las elecciones, que lo peor de todo era que ahora yo iba a tener la culpa de todo en Extremadura. Y lo asumo con todas las consecuencias. Entiendo que uno de los grandes cambios de la región en estos últimos 25 años ha sido la incorporación de la mujer como demandante de empleo y como trabajadora. En 1983 trabajaban 75.000 mujeres en Extremadura y ahora lo hacen 150.000. En la actualidad no podemos separar esto de un proceso de desaceleración económica del que, lógicamente, no escapa Extremadura. Respecto al empleo, yo creo que el problema no es estructural, es cuestión de ciclos. Estoy convencido de que si trabajamos bien, dentro de unos años, cuando se recupere el sector inmobiliario, vamos a estar en la mejor de las situaciones. Ahora sí, es cierto que de un año para acá ha habido un aumento de las cifras de desempleo, pero que en Extremadura ha sido inferior a la media nacional. Pero como no soy triunfalista lo digo muy claro: le miro a la cara a esa mujer, a Carmen, y le digo que todo lo que podemos hacer para resolver el problema del desempleo lo estamos haciendo y que mientras haya una sola persona sin empleo yo no puedo decir que estoy contento.

--¿Ha cumplido todo lo que prometió a los extremeños?

--Sinceramente creo que sí. Y entre los compromisos destaco la defensa en Europa de los intereses agrarios extremeños y la firma de acuerdos con la oposición y los agentes sociales para llevar adelante cuestiones importantes para la región. Hablo de temas como la reforma del estatuto, la educación, la comisión para el sistema financiero, el pacto local, la calidad del empleo, el desarrollo económico...

--¿Qué medidas destacaría?

--Son muchas, pero por ejemplo me comprometí a crear un órgano para que los alcaldes y la Junta buscáramos soluciones y lo hemos creado. También hemos impulsado el diálogo social, abriendo 18 ámbitos de negociación, tres de los cuales han cristalizado en acuerdos, como son el plan de prevención de riesgos laborales, el plan de fomento de la calidad en el empleo y el plan de desarrollo económico. Nos comprometimos a dar ayudas a las familias a partir del segundo hijo y las hemos puesto en marcha. Son muchas cosas.

--Pero también se comprometió a suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones y aún no se ha materializado.

--Es cierto que la supresión de este impuesto acumula un retraso de unos meses, pero lo vamos a hacer para que entre en vigor el 1 de enero del 2009. Sin embargo el balance global de lo hecho es bueno. En definitiva, creo que muchas de las cosas a las que nos comprometimos hace un año se han cumplido y en otras se están sentando las bases. Y hemos cumplido en un año en el que nos ha tocado gestionar la etapa más difícil en el plano económico desde el inicio de los 90 y eso condiciona mucho.

--Amelia Bejarano es una extremeña que tiene tres hijos y que estimaba hace un año, en este diario, que eran necesarias más ayudas para las familias. ¿Siente que con la ayuda a partir del segundo hijo ya ha cumplido? ¿Tiene pensadas otras ayudas para las familias?

--Hombre, yo creo que las ayudas a las familias, si uno ve los distintos ámbitos, están razonablemente cubiertas en Extremadura. Tenemos la ayuda directa de 300 euros desde el segundo hijo. En el ámbito educativo, acaba de salir toda una línea de ayuda para el transporte, los libros, los comedores, escolares, las aulas matinales... En sanidad, tenemos ayudas para medicamentos de familias numerosas y otras para los mayores. Y también está la mayor ayuda que puede haber para una familia, la de las viviendas del Plan 60.000 . Todas estas medidas agrupadas revelan un esfuerzo, aunque a lo mejor no tanto como todo el mundo querría. Pero quien diga que no estamos haciendo una política clara de ayuda a la familia no está diciendo la verdad.

--Desde el primer momento manifestó su preocupación por la escasa población de Extremadura. ¿Qué diagnóstico hace de esta situación un año después?

--Somos una comunidad que perdió desde mediados de los 60 la mitad de su población y que desde el 83 no pierde población pero tampoco la gana. Eso es un problema serio. Por eso primamos el nacimiento con las ayudas desde el segundo hijo para las familias. Y estoy convencido de que en España esto no ha hecho más que empezar. Habrá que seguir continuando para equipararnos a países donde ese acompañamiento económico que hacemos aquí a la familia hasta los tres años pueda llevarse hasta los 7, hasta los 10 o hasta los 15. Solo de esta forma se podrá lograr a medio plazo que aumentemos población, que es un gran reto.

--Hablando del clima de crisis actual, ¿por qué permiten las administraciones que suban tanto los precios de los productos básicos para las familias, mientras se enriquecen un grupo de especuladores y se empobrecen los agricultores?

--Yo creo que el problema es que hay mucha gente produciendo, solo unos pocos intermediarios y muchos consumidores finales. Eso hace que las diferencias entre lo que se produce en el campo y lo que se compra en la tienda sean tan significativas. Me consta que la ministra del Medio Ambiente, Rural y Marítimo está muy preocupada en este asunto y tiene mucho interés por solucionarlo.

--Pero las administraciones no están haciendo nada por resolverlo, no nos engañemos.

--Desde la Junta tenemos limitaciones para solucionar este problema, porque se trata de un problema globalizado, que está más en el ámbito europeo. Lo único que podemos hacer es denunciarlo.

--Hace pocos días invitaba a los extremeños en su blog a que le dijeran qué les preocupaba en su vida. Hubo 170 respuestas. ¿Qué conclusión sacó?

--Fue muy interesante, vi que las preocupaciones fundamentales de la gente están vinculadas al empleo. Concretamente el empleo para sus hijos, es una constante, y por eso es un motivo de preocupación para mí. Pero la gente también se preocupaba por la estabilidad social, el desarrollo de nuestro país y por los problemas de los demás.

--En el plano social, 8 años después de que se prometiera la habitación por enfermo en todos los hospitales, sigue sin cumplirse. ¿Porqué?

--Todos aquellos hospitales donde era posible hacerlo con obras de reforma se han adaptado, como es el caso de Llerena, Coria, Navalmoral, Zafra, Barros y Siberia-Serena Este. Pero hay hospitales donde, por sus características, no es posible hacerlo sin hacer un hospital nuevo, y en otros casos hay que gestionar prioridades. Si nosotros en el hospital de Plasencia solo hubiéramos querido hacer habitaciones individuales ya estaría hecho, pero decidimos que queríamos un hospital de referencia para el norte y las estamos acometiendo simultáneamente. Eso está haciendo que el proyecto se retrase. Yo asumo el retraso, pero también asumo decir que no hay en España una autonomía tan avanzada en esto como Extremadura. Podemos decir con orgullo que pese al retraso, hay una gran oferta de habitaciones individuales.

--Hablemos de la financiación autonómica. ¿Se equivocó Zapatero al aceptar publicar las balanzas fiscales, plegándose a las exigencias de Cataluña?

--No. Zapatero quiere transmitir el mensaje de que no hay nada que ocultar y estoy convencido de que las balanzas fiscales, si se publican, no tendrán ninguna consecuencia. La diferencia con nosotros es que yo entiendo que, como es algo que no responde a la realidad, no deberían publicarse. Extremadura puede poner múltiples ejemplos para evidenciar que en caso de que se publiquen no valen. El ejemplo más reciente se llama Carcesa, empresa que hace poco ha comprado un conocido empresario y ha trasladado su domicilio social a Mérida. Durante años, cuando se le daba la vuelta a la lata de tomate uno veía que la razón social estaba en un polígono industrial de Cataluña. Otro ejemplo es Almaraz, que genera la energía desde Extremadura pero el valor añadido lo deja en Euskadi. Por tanto, no queremos que se publiquen las balanzas no por temor, sino por rigor.

--¿Tiene miedo de que se rompa la solidaridad entre regiones?

--No tengo ninguna razón para pensar que al Gobierno de España le pase eso por la cabeza. Pero en el caso de que no se mantuviera este modelo que defendemos, ya he dicho lo que vamos a hacer, nadie nos puede imponer un modelo.

--¿Por qué se ha desencadenado esta rapiña autonómica?

--Esto es peligroso sí, por eso nosotros hemos repetido tanto en este proceso las palabras Constitución, España y españoles. Hay que incidir en que en España no tributan los territorios, tributan las personas, es una obviedad, pero una obviedad que algunos discuten. El esfuerzo fiscal de los extremeños es exactamente el que hacen otros españoles. Otra cosa es la capacidad fiscal de cada uno, que esta en función de la renta. Nosotros no tenemos nada que deberle a nadie.

--El AVE no estará funcionando en el 2010, ¿verdad?

--La historia no empieza ahora. La fecha del 2010 que se compromete en el plan de infraestructuras del Estado es una fecha que, desde el 2001, tenía que haber venido aparejada de trámites administrativos que no se hicieron. Cuando Zapatero llega al Gobierno en el 2004 no había ningún trámite del AVE, hubo que empezar de cero. Desde entonces se ha acelerado el proceso, que ha permitido que ahora haya dos tramos en obras y otro que se va adjudicar este mes. No seré yo el que le ponga plazos al AVE porque no seré yo el que le dé facilidades al gobierno para que se acomode. Esta semana he vuelto a exigir al gobierno la máxima celeridad en los compromisos que tiene contraídos con el AVE de Extremadura.

--Le veo más preocupado a usted por que se cumplan los compromisos del AVE que a la ministra de Fomento.

--Hombre, puedo decir que la ministra ha dicho a sus secretarios de Estado que el AVE de Extremadura es una prioridad. Pero es que yo no quiero dar argumentos a Fomento para que retrase el proyecto y por eso he adquirido un compromiso de que las estaciones deben decidirse antes de final de junio. No quiero que me digan que no han podido iniciar las obras que están adjudicadas, porque no se conoce la ubicación de las estaciones. Ahora, entre lo bueno y lo mejor, hay que elegir lo más rápido.

--Parece que el camino para la refinería ya está desbrozado.

--Lo importante es que en este proyecto se están respetando todas las garantías para el ciudadano. Las leyes se están cumpliendo a rajatabla. Algún día se sabrá, y de eso estaremos muy orgullosos en el Gobierno de Extremadura, que nunca en España se exigió tanto a alguien para la instalación de una industria. Y no debemos olvidarnos de que no se puede juzgar a esta industria con los ojos de hace 30 años, porque la innovación ha hecho que cosas que hace 30 años no estaban resueltas ahora lo estén.

--¿Tiene previsto presentar ante Bruselas el proyecto del aeropuerto de Cáceres?

--El aeropuerto necesita permisos de España y Europa. La Comisión Europea solo intervendrá si alguien le dice que actúe y yo no tengo duda, después algunas declaraciones públicas, que va a haber gente que va a llevar esto a Europa. Entonces lo que vamos a hacer es dialogar con la comisaria de Medio Ambiente. Vamos a presentarle un documento para explicarle porqué buscamos la centralidad en el aeropuerto, por razones operativas y estratégicas. Le preguntaremos a las autoridades europeas si ven dificultades insalvables para que nos tengamos que parar y no podamos progresar. Prefiero perder algo de tiempo ahora para ganarlo luego, porque lo peor que puede ocurrir es como en Ciudad Real que haya que parar la obra a la mitad y cambiarla. De todas formas, insisto que algún día se sabrá porque a nosotros las cosas nos cuestan más que a los demás, por las actitudes de fuera y las de dentro.

--¿Hay empresas interesadas en ser socias del aeropuerto?

--Caja Extremadura y sus asesores están preparando un documento que permita hacer un plan de inversión e ir a buscar empresarios que participen, pero tengo que decir que en los últimos meses ya han venido a hablar y a ofrecerse varias empresas, y eso que algunos decían que nadie querría.

--En verano será designado secretario general del PSOE. ¿Cómo afronta ese reto?

--En Extremadura se ha producido un proceso que se considera modélico en toda España, por la transición política de Juan Carlos Rodríguez Ibarra a ahora. Esto es algo que el partido le debía a Extremadura. Ahora Ibarra ha dicho que no quiere continuar al frente de la secretaría general y hay que hacer una transición en el partido,. pero a lo largo de este año yo he aprendido muchas cosas de él, y una es que no se postuló nunca para nada. Si los militantes creen que la mejor solución para esa transición soy yo, estoy dispuesto a afrontarla. Esta etapa nueva se construirá sobre la continuidad. Por último, yo creo en los proyectos más que en las personas y creo que todos tendremos que hacer un esfuerzo de generosidad para entender eso; evidentemente tengo que tener la libertad de hacer mi equipo, si el resultado final es que yo soy el secretario general del partido.

--¿Pero alberga alguna duda de que en el PSOE no le permitan formar su propio equipo?

--No no tengo ninguna duda, lo que si tengo duda es que el procedimiento sea el que yo diga. Porque sea el presidente de la Junta no tengo porqué ser el secretario general del partido.

--Pero está claro que usted será el líder del PSOE...

--Sí, pero bueno.... todavía falta, yo no he anunciado que vaya a ser secretario general porque aquí nunca nos hemos postulado.