"Jamás hemos tenido un problema con la Seguridad Social o con las nóminas, que se pagan religiosamente", subraya el alcalde de Alcántara, Luis Mario Muñoz. Y en cuanto a los proveedores, "como todo el mundo, no pagas en el momento que recibes la factura, pero vamos pagando". La deuda de este municipio era de algo más de dos millones de euros al acabar el 2009 de acuerdo con los datos del Ministerio de Economía. Su origen está, subraya Muñoz, en un "incremento del patrimonio" del municipio a través de la compra de una finca (denominada La Fraila) y de la construcción de una residencia geriátrica con 88 plazas que ha tenido un presupuesto de 1,8 millones de euros.

El alcalde de Alcántara destaca que el dinero necesario para edificar esta residencia se ha obtenido a través de un crédito del ICO y sin recibir "ayudas de ninguna otra administración ni tampoco privadas".

Muñoz lamenta que los ayuntamientos "tengan que prestar muchos más servicios de los que les corresponden sin recibir ninguna contraprestación a cambio". En su caso, señala que el consistorio alcantarino tiene que correr, por ejemplo, con parte del gasto que supone mantener cuatro celadoras en el centro de salud "o arreglar multitud de calles y hacer parques infantiles con ingresos municipales". "Antes al menos siempre venía alguna subvención pero ahora, con la crisis, prácticamente no llega nada", concluye.