El secretario general del PSOE extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que fue reelegido ayer en este cargo en el noveno Congreso Regional de los socialistas, dejó claro que el hecho de estar al frente de su partido no supone que vaya a presentarse a la reelección a la Presidencia de la Junta en los comicios autonómicos del 2007. Además, tras exponer un modelo de partido basado "en las ideas", avisó de que si en los próximos meses España no adquiere más derechos de emisión de gases contaminantes, nueve grandes proyectos industriales no podrían instalarse en la comunidad autónoma.

En la primera jornada del Congreso, la gestión de la Ejecutiva saliente fue respaldada por unanimidad, mientras que la candidatura de Rodríguez Ibarra a la Secretaría General del PSOE extremeño logró el apoyo de 295 de los 299 delegados (el 98,66% del total). En este sentido, el dirigente regional reclamó a los delegados que apoyen en la misma medida a la Ejecutiva, que se someterá hoy a votación.

Ibarra explicó, durante su informe de gestión ante los casi 300 delegados acreditados, que ser secretario regional del PSOE "sólo significa que voy a dirigir el partido", al tiempo que recordó que, según marcan los estatutos socialistas, "eso no significa ser candidato a nada", puesto que el candidato a la Junta "lo elegiremos en su momento". En esta línea, defendió su "libertad" para hacer lo que crea conveniente en el futuro y para no tener que sentirse atado como candidato por su continuidad al frente del PSOE extremeño.

GESTION AVALADA En un discurso que el propio Rodríguez Ibarra calificó de "poco tradicional" en este tipo de congresos, el dirigente socialista aclaró que no haría balance de la gestión de los últimos cuatro años porque ésta se avala por los últimos resultados electorales obtenidos por su formación. Así, volvió a insistir en que en la revolución tecnológica que se avecina Extremadura está "ante una oportunidad histórica".

Por eso, recalcó que ante los nuevos retos de la sociedad el PSOE debe posicionarse al frente y del Congreso Regional que hoy se clausura debe salir "la idea clara y contundente" de que hay que promover "un pacto" regional en el que se implicarían jóvenes, sindicatos y Organizaciones No Gubernamentales, entre otros estamentos sociales.

Por lo que se refiere a los retos de futuro, el líder de los socialistas extremeños señaló como prioritario un "cambio radical" en el sistema educativo a todos los niveles, y especialmente en la universidad, porque actualmente "se está formando a gente que no sirve para nada". Otro de los aspectos vitales a corto y medio plazo es cambiar algunos hábitos familiares para "creer y alimentar los sueños de nuestros hijos". Ibarra, que se confesó "preocupado como militante y optimista como ciudadano extremeño", recordó que el actual modelo social "cambia de forma vertiginosa", de forma que "la información no es poder", los ritmos de vida han variado sustancialmente en poco tiempo y ha cambiado el modleo productivo.

Aunque este último punto, marcado por la deslocalización empresarial, no afectará directamente a Extremadura, el secretario regional del PSOE sí alertó de los efectos que podría tener en la región la aplicación del Protocolo de Kyoto, que entra en vigor el 31 de julio.

Según Ibarra, las actuales limitaciones de emisiones contaminantes supondrían que sólo podría instalarse en la región uno de los diez proyectos industriales que hay previstos. Aún así, se mostró convencido de que el Gobierno comprará derechos de emisiones de otros países para posteriormente cederlos a las regiones Objetivo 1.