Rrecibimiento de honor a sus Majestados los Reyes Magos de Oriente en la capital extremeña. Miles de emeritenses salieron ayer a la calle fieles a su encuentro con Melchor, Gaspar y Baltasar que, bajo la mirada expectante de los más pequeños, desfilaron por la ciudad repartiendo magia e ilusicón. Medio millar de personas participaron en la tradicional cabalgata de Reyes, integrada por los grupos de pasacalles y 16 carrozas, desde donde se repartieron cerca de 4.000 kilos de caramelos, en su mayoría sin gluten.

La comitiva real partió desde la urbanización Proitinsa, en torno a las seis de la tarde, hacia Las Tres Fuentes y discurrió por Juan Carlos I, avenida Extremadura, calle Almendralejo, Paseo de Roma y calle Cava hasta su llegada a la plaza de España. Como manda la tradición, sus Majestades de Oriente salieron al balcón del ayuntamiento para saludar a los niños, quienes esperaban con impaciencia que llegara la noche más mágica del año. En toda cabalgata que se precie no pueden faltar los personajes y dibujos animados que tanto gustan a los más pequeños, por ello los superhéroes, el ratoncito pérez y los pitufos, entre otros, se convirtieron en el centro de las miradas a su paso por las calles emeritenses.

Los Reyes Magos repartieron caramelos desde las carrozas preparadas por la asociación de vecinos de la Antigua (Melchor), la asociación cultural Carnaval Romano (Gaspar) y la asociación de vecinos de la Calzada (Baltasar). A su paso, los mayores y pequeños se afanaban en hacerse con los caramelos de Sus Majestades poniendo en práctica sus mejores técnicas, ya fuese cogiéndolos al vuelo o del suelo. A pesar de que las nubes se mantuvieron durante la jornada, la lluvia no hizo su aparición en el desarrrollo de la cabalgata, que discurrió con normalidad y sin incidentes. Al finalizar, los niños volvieron a casa a la espera de abrir sus regalos.