En Badajoz las elecciones de hace un año no marcan un antes y un después, pues ésta es la cuarta legislatura con mayoría absoluta del PP. Pero los cambios en el gobierno y la despedida de los concejales fuertes Alejandro Ramírez del Molino y Cristina Herrera, han coincidido con acuerdos en asuntos que permanecían estancados. Por ejemplo: la agilización del edificio emblemático de Caja Badajoz, la recuperación del Guadiana, o la cesión de suelo para los colegios de Llera y Las Vaguadas y el Palacio de Justicia. Este ha sido el año de la aprobación del nuevo Plan General Municipal, el convenio con Rodamco para hacer un centro comercial en la antigua Hering y del proceso del derribo de Biblioteconomía, de momento suspendido.

Mirando un año atrás, el alcalde dice haber acertado con las incorporaciones a su equipo y se muestra optimista ante el futuro. "Ha sido un año de proyectos, de cumplir promesas electorales y de acuerdos con las administraciones", para llevar agua potable a Alvarado, rehabilitar la Alcazaba y la Plataforma Logística. Miguel Celdrán destaca actuaciones como la nueva web municipal, las áreas wifi o la adjudicación de la TV por internet, en cuanto a nuevas tecnologías y, en materia de movilidad sostenible: aparcamientos para motos, carril-bus, "tolerancia cero" con los infractores y los proyectos de párkings subterráneos en Sinforiano Madroñero y San Roque.

En otro ámbito, Badajoz celebra el bicentenario de la Guerra de Independencia. En junio se inaugurará una escultura de Manuel Godoy y se gestiona la traída de sus restos desde París.

Cola ha traído la reorganización de los mercadillos, cuyo traslado está decidido, pero pendiente aún. La construcción del parque de bomberos está en su última fase y se negocia con varias empresas hacer centros deportivos en la margen derecha y San Roque. Además, está prevista la nueva comisaría de la Policía Local en Valdepasillas. Pendiente quedan los túneles de la autopista, cuyos proyectos el ayuntamiento presentará al Gobierno.

Pero no todo ha sido ágil. Los presupuestos se aprobaron con seis meses de retraso, si bien, según el PP, son los mayores de la historia (140 millones), de los que 39,5 son para inversiones. Para el portavoz socialista, Francisco Muñoz, estas cuentas "tienen los pies de barro" por depender de la venta de patrimonio, aún por cerrar. Asuntos cotidianos sin resolver son la limpieza, cuya privatización anunció el alcalde pero no figura en el presupuesto. Tampoco se ha resuelto la del matadero municipal. Según los socialistas, Badajoz "tiene los problemas que tenía en lo que afecta a la limpieza o el tráfico, pero acrecentados". "El grupo de gobierno --dice Muñoz-- presenta grandes proyectos en los que sobre todo invierten otros, pero no aborda lo básico".

Las relaciones entre el ayuntamiento y la Junta --tradicionalmente malas-- parece que "han cambiado", aunque según el alcalde, aún no se ha traducido en nada. Muñoz apunta que el gobierno regional "siempre ha tenido una consideración importante" hacia Badajoz, como se aprecia en las entradas a la ciudad (desdoblamientos en las carreteras de Cáceres y Valverde).

Muñoz resume el año como "fiasco" porque, el PP "no será el que nació con la legislatura", en referencia a los cambios anunciados tras la decisión de José Antonio Monago de ir al Senado. El concejal de IU Manuel Sosa cree que este año se ha caracterizado por la "crisis del PP" agudizada po "la margarita de Monago". Para él, Monago y Celdrán "jugaban a la sucesión" hasta marzo y Monago llevó una "actividad frenética" pero a raíz del "desencuentro", el alcalde "está condenado a acabar la legislatura".

*Periodistas en Badajoz