No tenemos ninguna prisa". Aviso para navegantes del coordinador regional de IU, Pedro Escobar, que anunció anoche una "cortina de silencio y de tiempo" durante los próximos días para estudiar un procedimiento de consultas interno y también con colectivos con los que trabajó en la campaña electoral. El Consejo Político Regional de IU, su máximo órgano de decisión interno en la comunidad autónoma, será el que el domingo tome la decisión sobre qué hacer para conocer la opinión de la formación IU-Verdes-Siex en torno a los ofrecimientos que le llegan por parte de PSOE y PP para gobernar. En todo caso, ha dejado claro que hasta ese día no hablará más, pero asegura que en ese procedimiento de consultas no se descarta nada, incluso un "referéndum a la militancia, una consulta personalizada con dos o tres opciones" para que decidan qué es lo mejor, en su opinión, sobre posibles pactos. Otra opción, que posiblemente se haga en núcleos urbanos, sea la de asambleas abiertas en la calle, "al estilo del movimiento 15-M", indicó. En cualquier caso, asegura que la decisión final será tras consultar todas las opiniones y que no llegará posiblemente "hasta mediados de junio", incluso que puede prolongarse hasta "horas antes" de la sesión de investidura el 20 de junio.

Así lo avanzó anoche en un intervalo para atender a la prensa mientras se celebraba en Mérida una reunión de la Presidencia Regional de IU. En un próximo Consejo Político Regional dentro de unos días "seguramente tendremos una respuesta", comentó, pero a día de hoy "no hay unanimidad en IU a un problema tan complejo y vamos a buscar la opinión mayoritaria tras consultar dentro y fuera de la organización", con colectivos como autónomos, organizaciones agrarias, Adicae y otros que les han presentado propuestas durante la campaña electoral.

Escobar reconoció que desde los resultados electorales de la noche del domingo, quizá se está hablando demasiado sobre posibles pactos para favorecer la investidura como presidente de la Junta del actual jefe en funciones del Ejecutivo regional, Guillermo Fernández Vara, o del popular José Antonio Monago, cabeza visible de la lista más votada en los comicios en Extremadura. Lo cierto es que esas consultas se hacen muy necesarias, ya que no hay unanimidad en el seno de IU para disipar esta situación. Por ello, se hace necesario, comentó Escobar, esa "cortina de silencio y tiempo" en los próximos días. "Los afiliados, las organizaciones en los pueblos y comarcas y las bases tienen que pronunciarse" ante "un problema tan complejo", y en esa tesitura barajan todas las opciones apuntadas porque "es una decisión muy importante", que puede marcar el futuro de Extremadura a corto, medio, e incluso largo plazo, señaló.

En ese consejo regional del próximo domingo en Mérida, formado por 50 personas, se dará cuenta de cuál es el procedimiento de consulta, y en otro posterior "seguramente tendremos una respuesta" en torno a qué va a hacer la formación, si con su abstención o su voto favorecerá la investidura como presidente de Fernández Vara o de Monago.

SIN REUNIONES CON PP Y PSOE Por otro lado, el dirigente de IU manifestó que ni el PP ni el PSOE han remitido "ninguna invitación" a IU a efectos de abrir conversaciones. La formación izquierdista considera que son estos partidos mayoritarios lo que han de hacer propuestas, porque "nosotros tenemos tres diputados". Por ello, sentenció: "No está en nuestro calendario tener contactos con ellos".

Todo esto se lo hará saber hoy a Cayo Lara, coordinador federal de IU, que mantendrá una reunión en Madrid con todos los coordinadores regionales. Allí le comentará que la coalición se enfrenta en Extremadura a "un proceso difícil", por lo que insta a tener "paciencia" y no ponerse "nerviosos". Escobar repitió anoche en torno a las exigencias de Lara sobre no facilitar en ningún caso gobiernos del PP que "quizás las cosas en Madrid se ven de una manera y en Extremadura se ven de otra". Es fácil adivinar, argumentó, que "no hay unanimidad en Izquierda Unida frente a un problema que es tan complejo" y para el cual se buscará una solución "mayoritaria y democrática".

Lo que sí dejó claro es que la posición definitiva de Izquierda Unida será "única" porque habrá sido "consensuada y sustanciada" entre la dirección federal y la dirección extremeña, de modo que una vez adoptada "no habrá declaraciones altisonantes" ni por su parte ni por parte de Cayo Lara.

Mientras llega ese anunciado silencio y tiempo para reflexionar, lo cierto es que el propio Escobar siguió ayer pronunciándose en torno al papel fundamental de su coalición para el futuro gobierno extremeño. En distintas manifestaciones a los medios de comunicación a lo largo del día indicó que su formación puede respaldar a los socialistas y "frenar las políticas de derechas" o puede negar su ayuda a la formación que lleva casi 30 años gobernando una región que registra los mayores indicadores actuales de desempleo. A su juicio, el PSOE ha "defraudado a millones de trabajadores" y se ha convertido en un "cadáver político" que le lleva hasta esta encrucijada. Lo resolverá con el apoyo de la militancia.

El PSOE le ofrece un Gobierno compartido en Extremadura, pero él teme que, una vez al frente de la autonomía, los socialistas cambien sus compromisos iniciales; "luego empezarán las justificaciones", prevé. Por ello, advierte que el consenso es imposible "con las políticas que vienen haciendo", por lo que, antes de que IU se pronuncie, el PSOE "tendrá que reflexionar y cuestionarse su propia historia".

El dirigente extremeño de IU volvió a subrayar que no hay posibilidades descartadas, y que la decisión que tomen derivará de la reflexión sobre "qué es lo mejor para los extremeños".