En apenas un año, el jamón ibérico extremeño ha duplicado sus ventas al extranjero, según los datos de las Cámaras de Comercio, que indican que durante el 2005 las exportaciones de este producto rondaron los 1,3 millones de euros, mientras que el año pasado ya se situaron por encima de los dos millones.

Además, los datos parciales del año en curso apuntan a que la tendencia al alza se mantiene, ya que durante los ocho primeros meses del 2007 las ventas de jamón al extranjero ya rondaban los 1,2 millones de euros, lo que supone un incremento del 35% respecto al mismo periodo del año anterior.

En peso, durante el pasado año salieron de la región en torno a 184.000 kilos de jamón para su consumo en el extranjero.

NUEVOS MERCADOS Con todo, lo más relevante no son en sí las cifras de ventas, aún muy escasas en términos absolutos, sino la progresiva apertura de nuevos mercados para un producto que se ha encontrado con no pocas trabas --sobre todo barreras de tipo sanitario que, según los expertos consultados por EL PERIODICO, en realidad encubrían barreras al libre comercio para dificultar que el jamón pudiese competir con otros productos locales-- para darse a conocer a los consumidores extranjeros.

Así, hace unos pocos años apenas un puñado de países, del entorno europeo sobre todo, eran destinatarios de las exportaciones de las industrias regionales dedicadas al curado de piezas del ibérico. Ese abanico se ha abierto, especialmente en el último bienio, de una manera muy significativa.

Mercados como Austria, Reino Unido y Suiza ya son destinatarios del jamón, pero las expectativas están puestas en el funcionamiento de mercados como el japonés, el ruso o el mexicano, donde poco a poco se van logrando colocar los jamones de la región, y que en el futuro pueden suponer un incremento de la demanda muy relevante.

En este momento, Portugal sigue siendo el principal receptor de los jamones extremeños, y copa dos tercios del mercado de exportaciones. Sin embargo, pese al poco tiempo transcurrido desde la apertura de países como Japón, y las dificultades añadidas como la lejanía y el desconocimiento de este mercado, el jamón extremeño ya cuenta en este país asiático con el segundo mayor importador.

Otro país donde los derivados extremeños del ibérico se están logrando colocar con un éxito que augura incrementos futuros de la demanda son Polonia y Rusia. En cambio, en Alemania o Bélgica el jamón extremeño no acaba de arrancar, pese a que en estos países, y en otros como Francia e Italia, ya hace varios años que se iniciaron las ventas.

En todo caso, desde el sector ya se avisa de que no es un producto que vaya a alcanzar volúmenes muy grandes de ventas, al tratarse de producciones limitadas y caras.

Como muestra, los datos deproducción de piezas adheridasa la Denominación de OrigenDehesa de Extremadura sonprueba de que no se trata de conquistarmercados masivos, sinode instalarse en segmentos demercado mucho más exclusivosy dispuestos a pagar elevadosprecios –hasta 300 o 500 eurospor kilo– por productos de altagastronomía.Según estos datos, Dehesa deExtremadura ha precintado enla última campaña 66.000 jamonesde bellota y otras tantas paletasy con eso debe responder tantoa la demanda nacional comoa la exportación.

INCREMENTO DE PRODUCCIÓN. En todo caso, el porcino extre/-meño trabaja a marchas forzadaspara estar en disposición deafrontar los desafíos de una demandamás alta.Así, desde el 2004 se ha multiplicadopor 2,5 veces la producciónde animales de tronco ibérico,pasando de 60.000 madres reproductorasa más de 200.000.Esto supone un incremento exponencialde los animales parasacrificio, que pasan de 600.000a más de dos millones. Al mismotiempo, la industria transformadoraha experimentado un notablecrecimiento, pese a lo cualtodavía entre el 60% y el 70% delporcino criado en la región se sacrificafuera.

En todo caso, y tal y como advierteElena Diéguez, presidentade AECERIBER, entidad queagrupa a los criadores de ibérico,“los productos del ibérico nopodrán nunca producirse paraun mercado masivo, sino quetienen que tener como elementodiferenciador su calidad y su escasez,que les convierte en productosdelicatessen con un preciomás alto”.

Diéguez señaló además queun incremento de las ventas internacionalesno tiene por quésignificar que los derivados delibérico se conviertan en inaccesiblepara los consumidores regionalesy nacionales, “puesto quelas industrias ya se encargaránde incrementar la producciónpara dar respuesta a las demandasdel extranjero sin que se desabastezcael de aquí”.Este incremento de la capacidadproductiva también serviríapara evitar o paliar en gran medidaque muchos cerdos criadosen Extremadura se envíen al sacrificioy transformación fuera,permitiendo que el elevado valorañadido que generan estosproductos permanezca en la región.