El presidente de la Agencia de la Vivienda de Extremadura, Javier Corominas, garantizó ayer la construcción y desarrollo de la promoción de 3.968 viviendas en la finca Mejostilla de Espadero, en el Muelo, donde se proyectan 2.400 pisos del plan especial a un precio de 60.000 euros. Corominas aseguró que su afección a la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) tiene solución. Pero no se limitó a decir que este proyecto de interés regional (Pir) se acometerá. También adelantó que hay otras cuatro intervenciones, en diferente grado de desarrollo, que elevarían a casi 7.000 las viviendas del plan especial que se harían en Cáceres.

A las proyectadas en Mejostilla de Espadero (2.400 viviendas) y en las parcelas municipales de Ronda, Maltravieso y Casa Plata (237) se suman ahora las anunciadas en el poblado minero (400); el campus universitario, dentro de la finca La Moraleja, (900); junto a la urbanización Ceres Golf (150); y en Colmenarejo (1.200). Los tres últimas actuaciones están en un nivel de desarrollo muy inicial, incluso en el periodo de los contactos previos. Se encuentran en la fase "de redacción", según precisó Corominas.

Lo que no aclaró el presidente de la Agencia de la Vivienda es si la no incidencia de la ZEPA en el Pir de Mejostilla de Espadero significa que tampoco repercutirá negativamente en la aprobación definitiva del plan general municipal de urbanismo de Cáceres, como inicialmente comentó.

Corominas sólo aludió a una conversación que mantuvo con el consejero de Medio Ambiente, José Luis Quintana, quien, según explicó, le garantizó que no hay inconvenientes para que la actuación de Mejostilla continúe, puesto que se trata de "un problema que tiene solución, sin que por ello salgan perjudicados los conceptos medioambientales de Extremadura", según dijo Corominas en declaraciones recogidas por la agencia Europa Press.

De las declaraciones realizadas por Corominas desde que asumió la presidencia se desprende que no ha visto nunca claro el proyecto de Mejostilla de Espadero, y que apostaba por otras alternativas, que ayer anunció a pesar de que algunas están pendientes de concretarse. También se pone de relieve que el presidente ha tenido que precisar sus declaraciones de los últimos días sobre la viabilidad de la actuación y afirmar con más claridad que el proyecto se hará y que los motivos medioambientales no impedirán su desarrollo.

El presidente de la agencia deberá convencer ahora al consejo de Gobierno de la Junta del interés social de las nuevas intervenciones anunciadas para su tramitación como Pir, ya que suman una oferta que supera a la demanda, dado que al proyecto de Mejostilla de Espadero hay apuntadas 4.500 familias, mientras que ahora se harían 6.900 pisos, muy por encina de los 1.500 anunciados para esta legislatura. También deberá aclarar ahora cómo afectarán estas promociones a las previsiones recogidas en el futuro plan general y cómo lo alterarían.

De los nuevos proyectos anunciados por Corominas hay uno que no es necesario tramitar como Pir. Son las 400 viviendas de la promoción de Río Tinto, que ejecutará Pronorba en suelo urbano y dentro de una intervención de 2.000 viviendas que completan el desarrollo de Cáceres por el sur. Para su desarrollo sólo necesitan la aprobación del programa de ejecución que se presentó en el ayuntamiento.

La actuación anunciada por Corominas en la universidad se desarrollaría en la finca La Moraleja, en terrenos que el nuevo plan convertirá en urbanizables, aunque no los incluye entre los sectores prioritarios con ordenación detallada. Es un proyecto con varios promotores, entre los que está Juan Carlos Cotallo.

La intervención del Ceres Golf, en unos terrenos que están junto a la urbanización y que es la de menor volumen, está promovida por una cooperativa con el asesoramiento de una constructora local. El tercero de los proyectos, Colmenarejo, es el más numeroso por las viviendas que se anuncian, 1.200, aunque, según lo apuntado por Corominas, pueden llegar a 2.000.