La Cofradía del Señor Ecce-Homo y Nuestra Señora de los Dolores lució ayer en todo su esplendor por las calles de Jerez de los Caballeros pintando de color rojo la noche jerezana, al ir los nazarenos vestidos de este color.

Entre las novedades destacó los nuevos varales repujados, la candelería, faroles, ánforas y jarras del paso de palio de la Virgen de los Dolores, realizados en los talleres de los hermanos Delgado de Sevilla, así como el bordado del techo del palio, realizado por Fernández y Enríquez.

El paso de la Virgen también estrenó la Gloria del palio, una imagen de una Inmaculada sobre la ciudad, pintada por Juan M. Torrado.

Llamó la atención, como en años anteriores, la escolta de romanos a pie y la banda de cornetas, tambores, gaitas y platillos de la propia cofradía.

Hoy, esta Hermandad invita a quien lo desee a una comida de hermandad en el recinto ferial para degustar un plato de cocido extremeño, recuperando así la tradición de alimentar a los pobres, enfermos y presos de épocas pasadas.