El sector de la construcción y todo el mercado que conlleva está en situación de "encefalograma plano" y la situación financiera no mejora. Estos dos factores son "determinantes" para explicar que en Extremadura la compraventa de viviendas caiga cuatro veces más que la media española. Además, el panorama, lejos de mejorar, se vislumbra aún peor ante los anunciados recortes presupuestarios en materia de obra pública anunciados por la Junta para el año 2012, algo que "solo hará que aumente la incertidumbre", según José Luis Iglesias, gerente de la Federación Provincial de la Pequeña y Mediana Empresa de la Construcción de Cáceres (Pymecon), poniendo al sector "al borde del abismo, abocados al cierre de muchas empresas y al incremento del paro".

A su juicio, el mercado de la vivienda en Extremadura no puede bajar más los precios, pero se encuentra con un problema añadido: "Los mayores competidores son las entidades financieras", que no prestan créditos e intentan vender primero sus inmuebles. Lo único que está "funcionando un poco", dice, es la vivienda protegida, que también tiene dificultades para la financiación, aunque "cuando presentas una lista de demandantes, el banco te la deja en la mínima expresión para elegir a los compradores".

Con todo ello, "no vemos que la situación vaya a mejorar, ya que mientras no se abra el crédito no habrá mejoras". Además, esos recortes presupuestarios de la Junta "puede ser definitivo para el sector".