Dolores Aguedo Morcillo presentaba una única herida de arma blanca en el hemotórax derecho (al otro lado del corazón) que le atravesó de derecha a izquierda y le alcanzó el corazón. Según el informe forense, la herida fue mortal porque el agresor le introdujo prácticamente la hoja entera de un cuchillo de 22 centímetros. Ella además presentaba en la mano izquierda un par de heridas pequeñas entre los dedos que quizá se produjeron por haber puesto la mano delante para defenderse.

El examen forense que se le practicó en el Hospital Infanta Cristina no deja claro si esta joven estaba embarazada, como en un principio se informó, aunque está pendiente de una posterior revisión. Personas cercanas a Loli también manifestaron ayer que no se encontraba en estado, aunque lo pretendía.

En el caso de su hermano, José Manuel Aguedo, la muerte se la produjo un disparo en el hemotórax izquierdo que le atravesó el corazón. Según el informe forense, el fallecimiento fue fulminante y cayó en el sitio.

De la autopsia no se puede saber qué le ocurrió a esta persona para reaccionar como lo hizo. Todo apunta a que presentara algún trastorno psiquiátrico de tipo psicótico y pudiera estar sufriendo alucinaciones, como se deduce de la actitud que mantuvo de ir agrediendo a todo aquel que se iba encontrando, lo que lleva a pensar que esa persona en esos momentos estaba desconectada de la realidad.

Se le va a realizar una analítica de tóxicos para comprobar si estaba bajo los efectos de alguna sustancia que hubiera consumido horas antes y hubiera desencadenado un cuadro de este tipo. De otra forma, no se puede saber qué pasó por su cabeza en ese momento.