La lucha contra el fraude en las bajas laborales es una de las prioridades del Instituto Nacional de la Seguridad Social, entre otras cosas porque la factura de estas bajas alcanza ya los 4.650 millones de euros al año, aunque la mitad de esta cantidad la abonan las mutuas.

Para conocer la incidencia real del fraude en la región y, al mismo tiempo, reducir el tiempo de baja de los trabajadores el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales y el Ejecutivo extremeño han suscrito un convenio que supondrá en la práctica un control exhaustivo de las bajas laborales que se produzcan por hasta 14 patologías. Este programa piloto incluye dolencias como los dolores de espalda o torceduras y esguinces de tobillo. Cada vez que haya una baja de este tipo saltarán las ´alarmas´ en atención primaria y especializada y se aplicará el protocolo establecido.

Hay que tener en cuenta que las incapacidades temporales aumentan en España entre un 12% y un 14% cada año, a un ritmo muy superior al que registra la economía española.