"Hasta ahora la farmacia ha sido un negocio seguro, pero somos ya un sector asfixiado porque las circunstancias han cambiado". Son palabras de Cecilio Venegas, presidente del Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Extremadura (Coexfar). Se refiere en concreto a las consecuencias que les puede ocasionar a las farmacias asumir un 6% del coste de los medicamentos (un 4% lo costea el consumidor y el resto el sistema sanitario público). "Estamos preocupados por el futuro", comenta, sobre todo porque esos mayores costes pueden repercutir a la hora de generar puestos de trabajo. A eso se une que el hecho de que "nos han metido una viruta de 1.400 euros por farmacia" por la entrada en vigor del decreto 8/2010 aprobado por el Gobierno sobre medidas extraordinarias para reducir el déficit público. "Esos 1.400 euros por farmacia suponen un empleado que no viene", insiste.

El temor de los farmacéuticos es que "las farmacias ya pagan por la sostenibilidad del sistema más que los usuarios, y eso me parece cuanto menos curioso", argumenta en relación a ese 6% de copago que asumen, frente al 4% de los consumidores, "cuando hace diez años el consumidor pagaba el 10%".

Por otro lado, destaca el "modélico" sistema de distribución farmacéutica en la región, ya que "las medicinas están en dos horas en cualquier pueblo y eso cuesta mucho dinero mantenerlo".