"La medida la podrán aplicar, pero tiene poco recorrido", resalta Antonio García Salas, socio director de la Escuela de Negocios Itae, para quien tanto las empresas como los particulares ya se ha acostumbrado a hacer "un uso indefinido de internet, 24 horas al día, siete días a la semana, 365 días al año". Cree que unas tarifas que castiguen a quienes más usan la red "no tienen sentido", y que si las operadoras intentan imponer un modelo de esta clase, acabarán apareciendo "otras alternativas de tarifa plana", ya que no considera que se vaya a renunciar a algo que ha sido "una conquista de la colectividad". García Salas también apunta que los mayores gastos que deben afrontar las operadoras son siempre las inversiones iniciales en infraestructuras, pero que luego los costes variables generados por los usuarios "son mínimos".

Este responsable de Itae explica que se ha pasado de un modelo económico en el que los principales recursos eran escasos a otro en el que "el principal recurso, que es el conocimiento, es ilimitado" y "si se restringe la conexión, este esquema cambia".