--Si la dignidad de una vivienda no se mide por metros cuadrados, ¿qué tiene que decir de los minipisos?--La realidad ha demostrado que la polémica ha desaparecido. La polvareda partió de una tergiversación en una rueda de prensa. Lo importante es que estos pisos son una realidad en España desde hace años y responden a una demanda real. Es una tipología de vivienda pequeña, en alquiler, de forma transitoria, para quien quiera acceder a ella. Quien pueda acceder a una vivienda de éstas en régimen de protegida va a acceder a un alquiler asequible que puede pasar a la propiedad con carácter preferente. Ya se están construyendo en España, y también en Extremadura.

--Otro de sus planes ´estrella´ es la Agencia Pública de Alquiler. ¿Cree que será posible compatibilizar las agencias de alquiler de ámbito autonómico con la estatal?--Totalmente. Cuando nos planteamos dinamizar el mercado del alquiler nuestro objetivo no era competir sino dinamizar. No queremos competir con el sector privado, pero queremos dinamizar un producto que es fruto de un fallo en el mercado de alquiler. Y está siendo un acierto. Fíjense: a día de hoy, y después de que durante el mes de agosto la Sociedad Pública de Alquiler ha hecho saber a los ciudadanos su disposición para recibir viviendas y gestionarlas, cuenta ya con 1.100 viviendas, que están disponibles para ser ofertadas. Esto demuestra que el Gobierno ha creado un servicio público que estaba siendo esperado y demandado por los ciudadanos. Esta iniciativa lleva el sello y la garantía del Estado, y eso da seguridad al propietario. Además, al inquilino le asegura una asequibilidad en la renta. Todo está teniendo un efecto muy positivo. En breve vamos a firmar los convenios para la Sociedad Pública de Alquiler del Principado de Asturias y Cantabria, que ya han pasado por sus consejos de gobierno. Y los próximos serán Cataluña y Andalucía. También trabajamos con ayuntamientos para colaborar con las agencias municipales, porque en todas estas políticas los ayuntamientos tienen competencias muy importantes que pueden ejecutar.

--Y al hilo de esta nueva política ¿cambiará la fiscalidad del alquiler en los próximos presupuestos?--No me voy a pronunciar sobre un tema que está aún pendiente y que corresponde a otro negociado. El objeto es buscar una neutralidad fiscal en la compra y el alquiler para converger con Europa y a través de todas nuestras políticas trabajamos en esa dirección. Ahora está la reforma fiscal pendiente. Hay algunas cuestiones que han salido de la reforma fiscal global, que afectaría al IRPF y otros impuestos sobre los que ya tenemos iniciativas metidas en las Cortes Generales. Se está estudiando para buscar un equilibrio y una neutralidad fiscal.