La leche, los yogures, la fruta fresca, los preparados de legumbres y hortalizas, los cereales, el café y el pan son los alimentos de la cesta de la compra que más se han encarecido en los últimos doce meses en Extremadura y son los responsbles, en gran parte, de que la región registre el peor dato de inflación desde 1995. En concreto, la leche se ha encarecido un 20% y más de un 12% los derivados lácteos, la fruta y las legumbres. Dejando a un lado la comida, la mayor subida es la de la calefacción, el alumbrado y el agua, un 11,7%, seguida de la del transporte, un 9,6%, debido al alza del petróleo.