El presidente de la Junta señaló que el Ejecutivo regional se anticipó a los posibles efectos adversos de una caída en la actividad del sector inmobiliario, impulsando en el Consejo Extraordinario de Gobierno de hace dos meses un plan de infraestructuras, cuyo efecto, entre otros, será el de contribuir a mantener el empleo y la actividad en el sector de la construcción. Vara señaló que se impulsó este plan cuando se empezó a ver que la situación nacional e internacional se estaba deteriorando y que eso tendría efectos en la región.

En el mismo sentido, el presidente extremeño explicó que también se están agilizando las licitaciones públicas con la finalidad de evitar parones en la actividad, a la vez que se vienen impulsando planes de vivienda protegida que también permitirán que las empresas constructoras cuenten con alternativa ante la caída del mercado privado. Fernández Vara se declaró "optimista por naturaleza" y mostró su convencimiento en que "pese a la situación tan compleja que vivimos", el crecimiento económico regional será mayor de lo augurado.