La Asociación de Empresas Madereras de Extremadura (Aremex) alerta que el incendio de Las Hurdes podría afectar negativamente al sector, ya que la madera quemada que, posteriormente, es subastada para su comercialización, produce un exceso de "stocks" en el mercado.

Según la agencia Efe. el presidente de Aremex, Aurelio Casasolas, aclara que la madera quemada se comercializa mediante subastas organizadas por la Junta de Extremadura antes de transcurridos dos años del fuego, ya que a partir de ese límite de tiempo comienza la putrefacción. Llegado ese momento, según el presidente de Aremex, el fuego de Las Hurdes podría incidir en el precio, "pero para mal". "Los madereros no queremos que se nos quemen los bosques porque comemos y vivimos de ellos de toda la vida y no queremos que desaparezcan, los fuegos no son buenos", añade y subraya que es un "bien escaso" que no debe ser desaprovechado.

Por su parte, Tomás García Velarde, miembro de la asociación, aclara el incendio es un desastre ecológico para el sistema de montes y de biomasa, y puntualiza que esta madera no interesa a los empresarios para su comercialización al necesitar de un mayor tratamiento y no ser válida, por ejemplo, como envase para alimentación.

La madera quemada se usa habitualmente para la construcción de tableros de aglomerado y, la que no está muy afectada, para palés.