Antes de que Nueva Rumasa se hiciese con el control de Cárnicas Oliventinas a mediados del año pasado, la familia Ruiz-Mateos también puso en su punto de mira a Mafresa. La principal industria extremeña del ibérico había iniciado el proceso para sustituir a su accionista mayoritario, Angel del Cid, que culminó hace varios meses con la llegada de la firma aragonesa Grupo Jorge. Juan Luis Aceitón, director general de Mafresa, explicó ayer que en todo momento tuvo claro que las conversaciones con Nueva Rumasa "nunca" podrían fructificar. Por un lado, indicó que la empresa pública de capital riesgo antes conocida como Sofiex, que está presente en el accionariado de Mafresa, difícilmente hubiese dado su apoyo a la operación. Por otro, recalca que Mafresa no encaja en el perfil de empresa que buscaba Nueva Rumasa: sociedades con un alto nivel de endeudamiento cuya compra exigía desembolsos no muy elevados. De hecho, precisa, la familia Ruiz-Mateos nunca llegó a visitar esta industria de Fregenal de la Sierra, algo que sí hicieron directivos de Carcesa, informa Eduardo Barajas.