Como ella misma reconoce, en su profesión las puertas del mercado laboral están abiertas de par en par. "Tiene bastantes salidas, porque hay una gran demanda de enfermeros. Cada vez hay más hospitales, más centros de salud, más clínicas privadas, más centros de día, más residencias geriátricas...". Y de momento ella ya ha podido probar algunas de esas mieles, porque ha trabajado durante el verano en el centro de salud de su localidad, Guareña, y puede que en los próximos días la llamen para que eche una mano durante las vacaciones de Navidad.

Con 21 años, su futuro inmediato pasa por la beca de la Junta como mejor expediente del 2007 en la diplomatura de Enfermería en Badajoz. Porque salvo esas pequeñas prácticas en su pueblo y a pesar de la gran demanda del sector, todavía no ha encontrado una oferta que la satisfaga. "Al sistema público se accede por oposición y la situación es difícil. Llevan ocho años sin convocarlas y cuando lo hagan creo que será para consolidar a quienes ya ocupan las plazas", lamenta.

A pesar de todo, prepara las oposiciones a la vez que realiza un curso sobre medicina tropical. Eso sí, su objetivo es obtener una plaza cuanto antes, ya sea aquí o fuera: "Es factible lograr una plaza en la región, pero hay más posibilidades en otras comunidades donde la oferta es mayor, como Andalucía o Madrid, donde hay mucho trabajo a nivel privado". Y además están las diferencias de salarios: "Ahora quizás no, pero siempre terminas teniéndolo en cuenta".