El camping junto a la playa de Orellana cuenta con una decena de empleados esta temporada estival. Es el doble de lo habitual en invierno, cuando se mantienen apenas cuatro trabajadores en plantilla. «Estamos abiertos todo el año y en verano doblamos el empleo», cuenta Luis López, el director de estas instalaciones, propiedad de la Junta, que gestiona desde hace poco más de un año.

Tomó las riendas del Camping Balcón de Orellana en marzo del 2018 y está intentando relanzar este alojamiento que hasta entonces abría solo algunos meses. «Estamos viendo que el camping tiene recorrido durante todo el año, aunque el verano es la época más importante, sin duda», cuenta. Espera colgar el cartel de completo (cuenta con 70 parcelas y cuatro bungalows) al menos algunos días durante este verano. «En Semana Santa estuvimos al 100% tres días y la intención es que esto se repita».

Este establecimiento es solo un ejemplo de lo que supone el turismo en Extremadura en esta época: más visitantes y más contrataciones. Hasta un millar de empleos estima la Dirección General de Turismo que va a crear este sector en los tres próximos meses en Extremadura.

Un contrato de dos meses

Uno de esos contratos lo acaba de firmar Miguel Ángel Alcón, un joven de 26 años de Plasencia que este verano trabaja durante dos meses como socorrista en la piscina municipal de Jerte. «Es una oportunidad laboral que me permite contar con unos ingresos extra y además conocer gente nueva, tanto de la zona como extranjera que viene de visita», cuenta.

No es su primera experiencia como socorrista: «El año pasado ya trabajé en la piscina de Jerte y hace dos años en la de Cabezabellosa». Fuera de la temporada estival, Miguel Ángel, que es técnico en gestión forestal y ha trabajado en el sector de la seguridad privada en Madrid, está preparando las oposiciones de agente del medio natural y también ayuda en la ganadería familiar.

Este joven tiene uno de esos empleos del verano que se generan en el sector turístico y que se concentran especialmente en la hostelería, el ocio y los diferentes alojamientos de la comunidad. «Y sobre todo en el norte de la región», destacan desde la Federación Extremeña de Turismo Rural (Fextur).

Más de 27.000 afiliados

Más allá de los contratos de esta época estival, el empleo en el sector turístico va en aumento en los últimos años. En el conjunto de los servicios de alojamiento, comida, bebida, agencias de viaje y operadores turísticos, el turismo superó los 27.000 afiliados a la Seguridad Social en la región durante el pasado mes de mayo, lo que supone un 3,4% más respecto a abril y casi un 6% más respecto al mismo mes del 2018 (entonces había 25.567 empleos directos). Y son 6.195 nuevos contratos si se compara la cifra con mayo del 2012, cuando se contabilizaban 20.892 afiliados en este sector, según los datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Un útimo dato: el sector turístico supone el 6% del Producto Interior Bruto (PIB) de Extremadura.