"Día 5 de diciembre, son las cinco y quince minutos de la madrugada. Me atrevo a decir que después de muchísimos ejercicios y muchísimos momentos de meditación (...) creo que el número que saldrá el día 22 del primer premio de la lotería de Navidad será el 5, 4, 6, 0, 0, 54.600".

Estas palabras contenía la cinta que ayer, ante notario, se sacó de la urna que colgaba desde el pasado día 15 de la Torre Bujaco y en la que el mentalista cacereño Santillana aseguró hace una semana haber grabado el número del gordo de Navidad. Y acertó. Las cifras grabadas se correspondían con las que los niños de San Idelfonso cantaron unos minutos después de empezar el sorteo. La jefa de prensa del ayuntamiento, Sonia Cobo, acompañada del notario Luis Ruíz Ortigosa, fue la encargada de bajar la urna.

Por "seguridad", según explicó el mismo Santillana, además escribió en una carta --que envió por correo certificado a la Torre Bujaco y a la atención de la edil Cristina Leirachá--, un mensaje con la misma predicción: saldría el 54.600.

Una vez comprobado su tino y recibido el aplauso de los presentes, Santillana --nervioso momentos antes de que comenzara el acto-- señaló que ahora era tiempo para "la serenidad", aunque "me la he jugado mucho".

El mentalista confirmó que no llevaba décimos del número premiado porque "creo que no tenía que ser así por mi propia personalidad". Preguntado por las dudas suscitadas por la prueba, dijo que pensaba que "debo dejar a los demás que piensen por mí, porque yo ya he pensado bastante para este número".

El mentalista comentó que desde que anunció su predicción ha vivido algunas situaciones curiosas. El viernes, tras comer en un restaurante compró un décimo en el local y "me dijeron que los números que les quedaban volaron en cinco minutos". Del Sorteo del Niño no soltó prenda.