Un estudio sobre los efectos de la siesta en la salud realizado sobre 400 personas y coordinado por el jefe del Servicio de Neumología del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, Fernando Masa, señala que su práctica habitual durante más de media hora evidencia que pueden padecerse apneas del sueño. Según Masa, un 30% de españoles practica la siesta duradera.
El tiempo que no se duerme, insisten los especialistas, no se recupera. Es decir, las horas de sueño perdidas se acumulan y la siesta no sirve para recuperar el sueño del día anterior. Además, recomiendan que la siesta, que si es breve se convierte en un hábito saludable, sea de unos 15 minutos.
Los expertos aconsejan poner en práctica una serie de normas básicas para mejorar el sueño y, por tanto, la salud. En este sentido insisten en la conveniencia de esperar para ir a dormir después de cenar, realizar una actividad relajante antes de acostarse y dormir una media de entre 7 y 8 horas para estar descansado.
