Uranio, agua y sol, cada vez más sol. Esa es la fórmula de la producción de electricidad en Extremadura, una comunidad autónoma con superávit en su generación --la región apenas consume una cuarta parte de la luz que produce-- y que comienza a brillar a nivel nacional por su importante apuesta por las fuentes de energía renovables, especialmente la de origen solar.
El director de la Agencia Extremeña de la Energía, Fernando López, se hizo ayer eco de dos datos que reflejan perfectamente hacia donde camina la política energética de la comunidad autónoma. "Extremadura fue en el 2008 líder en producción eléctrica con tecnología fotovoltaica y en el 2009, la segunda comunidad autónoma el producción termosolar, solo por detrás de Andalucía", explicó durante la presentación de un informe sobre el comportamiento del sector en la región durante esos dos años --los datos relativos al 2010 se darán a conocer en los próximos meses--.
Entre el 2006 y el 2009, Extremadura ha pasado de tener una potencia instalada de 3,6 a 400 megawatios eléctricos en plantas fotovoltaicas. Eso ha permitido que cerca del 6% de la electricidad vertida a la red nacional desde la región sea procedente de este tipo de instalaciones. Más rápido aún ha sido el asentamiento de las centrales termosolares. Las dos primeras se pusieron en marcha en el 2009, aunque hoy ya existen seis operativas, hay tres en construcción avanzada y otras 10 están proyectadas, con el visto bueno de la Junta y con luz verde del Ministerio de Industria para cobrar la prima por producción de electricidad renovable una vez que entren en funcionamiento. Todas ellas tienen una potencia de 50 megawatios y se basan en la tecnología de canal parabólico, concentrando los rayos del sol en tubo por el que circulan sales que son calentadas.
Además "esperamos que el Gobierno saque otro decreto de preasignación en los próximos años que permita que la cifra de plantas se amplíe en otras 10 o 12 más", apuntó ayer en Cáceres el director general de Ordenación Industrial y Planificación Energética, José Luis Andrade.
Como un reactor nuclear
En total, Extremadura cuenta con 19 termosolares, bien ya construidas, en proceso o sobre el papel. Solo Andalucía, que tiene mayor superficie y mejores condiciones climáticas para el aprovechamiento de la energía solar, supera esa cifra, con 22. Castilla-La Mancha se queda en 15 y Cataluña y Comunidad Valenciana tienen proyectada una y una. Si el Ministerio no aprueba nuevas iniciativas, una vez que todas estén terminadas, España contará con 60 plantas de este tipo, lo que supondrá una potencia instalada de 2.472 megawatios. Solo en Extremadura sumarán 950 megawatios eléctricos, casi los mismo que cualquiera de los dos reactores nucleares de Almaraz.
"Seguimos apostando por la fotovoltaica y seguiremos apostando por la termosolar", subrayó ayer Andrade. La que no termina de arrancar es la eólica. Los 26 parques eólicos aprobados por la Junta en el 2008 esperan a una nueva convocatoria de preasignación de primas --subvenciones a la producción de electricidad renovable-- para comenzar a construirlas. Y la administración trabaja ya con las más de 250 propuestas nueva que se han presentado. "Esperamos los informes técnicos para su aprobación inicial y queremos agilizar el proceso para que también lleguen a tiempo de la próxima preasignación", explicó el director general.
