El primer paso ya está dado y el congreso regional del PP arranca con un póker de candidatos. Al alcalde moralo, Rafael Mateos, que fue el que más madrugó para presentar su candidatura y lo hizo el lunes pasado, se unieron ayer, por este orden, Pedro Acedo, exalcalde de Mérida; José Antonio Monago, concejal en Badajoz, y Antonio Guerrero, exalcalde de La Zarza. A falta de que las firmas presentadas sean validadas --se necesitaban un mínimo de 90, pero todos presentaron más por si había duplicaciones que invalidaran algún aval-- y a expensas de posibles pactos precongreso, serán quienes traten de convencer a los compromisarios para que les apoyen el 8 de noviembre.

JOSE ANTONIO MONAGO El candidato que parte con la ventaja de venir apoyado por la dirección regional, lo que le otorgaría de entrada el 17% de los votos en manos de los compromisarios natos, protagonizó la entrada más espectacular. Acudió a la sede regional flanqueado por numerosos cargos orgánicos y electos, entre ellos el presidente provincial de Cáceres, Laureano León; el diputado Luis Alfonso Hernández Carrón; el exalcalde placentino, José Luis Díaz; el exdiputado Fernando Baselga,...

Comenzó diciendo que no se considera "un mirlo blanco, un salvador o un líder, sino que vengo a poner mi grano de arena". Aunque también señaló: "Creo que hubiese sido un magnífico alcalde de Badajoz (anunció que si sale elegido presidente dejará el ayuntamiento) y puedo ser un magnífico presidente de la Junta". En tono conciliador prometió "trabajo" y aseguró que hablará con todos "porque las diferencias que tenga con compañeros de partido serán siempre infinitamente menores que las que pueda tener con alguien del PSOE o de IU".

Monago se declaró incluso dispuesto a ceder el primer puesto de la lista si hay acuerdo. Además, señaló: "No soy el candidato de Génova (sede nacional del PP)", cuestión que refrendó la propia dirección nacional del PP a EL PERIODICO, al señalar que se apoyará "a quien gane el congreso".

Respecto a la crítica de que representa el pasado del PP extremeño cuajado de fracasos electorales, comentó: "Difícilmente puedo ser el pasado con 42 años, y lo que me gusta es ganar, y vengo de un ayuntamiento con cuatro mayorías absolutas".

PEDRO ACEDO Por su parte, el exalcalde emeritense, que presentó sus firmas horas antes que Monago, mostró su convencimiento en que el PP necesita "un cambio profundo" y que ese cambio "no lo pueden ofrecer los mismos que están ahora o algo que se parezca a lo mismo que hay".

Pese a afirmar que el congreso se juega "con cartas marcadas" por el escaso, a su juicio, número de compromisarios, se declaró ilusionado y esperanzado "en que los compromisarios me escuchen". Según Acedo, si la dirección nacional respaldase a algún candidato "sería una barbaridad que yo denunciaría".

Por lo que se refiere a la posibilidad de alcanzar pactos con otros candidatos, el exalcalde emeritense indicó que un aspirante respaldado por el actual presidente, Carlos Floriano, "representa la continuidad, y si eso es lo que se quiere, pues muy bien". También ironizó con la posibilidad de pactar con Monago, del que dijo: "Puede venir en mi lista, porque si ocupa seis o siete cargos, será porque tiene muchos valores", para agregar: "Estoy mucho más cerca de los que quieren un cambio".

ANTONIO GUERRERO El último candidato en presentar las firmas se mostró convencido de que la representación que tiene el PP actualmente "no se corresponde con lo que representa este partido en la sociedad extremeña".

Guerrero apostó por un discurso "próximo y que aborde los problemas reales de la gente", y ofreció "trabajo en equipo, no un partido personalista, porque cuando se cae en personalismos y se falla, nos encontramos con lo que hay ahora".

Afirmó que si sale elegido propiciará "una oposición seria, firme y valiente, sobre todo valiente, porque Vara es nocivo para Extremadura". En su opinión, y salvo alguna excepción la oposición del PP extremeño es "tibia".

Respecto a pactos, advirtió de que no entrará "en chalaneos ni reparto de cargos", y señaló que hay que recuperar a gente válida que se ha quedado en el camino. En todo caso, Guerrero indicó que su objetivo es poder alcanzar una candidatura única.

RAFAEL MATEOS En la presentación de sus avales el pasado lunes, el alcalde moralo ya declaró que también iría por una candidatura de unidad, pero dejó claro que nunca respaldaría una lista encabezada por Monago.

Según comentó, no ve a nadie más capacitado que él mismo para aglutinar todas las voces de los populares. También explicó que el primer paso para que el PP aspire a ganar las elecciones autonómicas es superar las divisiones internas, y concienciarse de que debe existir un proyecto regional. No rechazó la unidad, pero señaló que su intención es "llegar hasta el final".