El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y el del Partido Popular de Extremadura, José Antonio Monago, protagonizaron ayer un cruce de acusaciones a cuenta de la propuesta del Ministerio de Fomento de ubicar la estación internacional Badajoz-Elvas del AVE en territorio español. Mientras Monago destacó que el planteamiento del Gobierno coincide con los que había sugerido el PP y, por tanto, demuestra a su juicio que este partido "es útil al interés general de los extremeños", Vara le acusó de "sobreactuar" en sus declaraciones sobre este asunto.

Según el presidente extremeño, "para que sea un éxito, la estación han de sentirla como propia a ambos lados de la frontera, los 250.000 que podemos utilizarla del lado de acá, y los más de 100.000 que la pueden usar del lado de allá". Para ello, dijo, hay que presentarla "claramente como una estación compartida, y ahora que los técnicos decidan qué tiene que haber de un lado y qué tiene que haber del otro".

Por su parte, Monago señaló que no cree "que se pueda entender que donde existe más población, que es a este lado de la frontera española no tuviera la estación internacional del AVE". Además, recordó que cuando hizo esta propuesta, desde el PSOE le acusaron de "localista".

Por su parte, el consejero de Fomento, José Luis Quintana, resaltó que lo importante de la estación cercana a la frontera es que tenga carácter internacional, se llame Badajoz-Elvas y que en ella "nos sintamos identificados ambas partes". Finalmente, desde el PSOE de Extremadura mostraron su "satisfacción" por la propuesta del Gobierno.