De cara al exterior, reducir los viajes y la asistencia a ferias y congresos a lo estrictamente necesario y fomentar los medios telemáticos para la realización de reuniones. Dentro de los centros de trabajo, la recomendación de no saludarse con un contacto directo, colocar geles antisépticos en diferentes puntos o dejar de fichar con sistemas de huella digital. Estas son solo algunas de las medidas que se están implantando en varias de las principales empresas extremeñas para intentar protegerse, en la medida de lo posible, del coronavirus. Algunas de ellas ya consideran la posibilidad del teletrabajo en los casos, no demasiado frecuentes, en los que esto sea posible.

Ninguna de las firmas consultadas por este diario está teniendo problemas ni con los suministros ni con la comercialización de sus productos, aunque lo más habitual es que añadan a esta afirmación la coletilla de ‘por el momento’. Otras, como Grupo Gallardo Balboa y Grupo Cristian Lay, han preferido no facilitar información en relación a este asunto

Cuestionario en Almaraz

Cuestionario en AlmarazLa Central Nuclear de Almaraz ha preparado un cuestionario que debe cumplimentar, antes del próximo viernes, todo el personal que diariamente acude a trabajar a la planta, entre ochocientas y novecientas personas sumando la plantilla propia y las diferentes subcontratas. Las cuestiones que hay que responder en él son si se presenta algún síntoma asociado a este virus (fiebre, tos o dificultad respiratoria, entre otros) y si en los últimos quince días se ha producido alguno de los siguientes tres supuestos: se ha estado en algún país sujeto a restricciones (China, Italia, Corea del Sur, Japón…); se ha mantenido contacto con alguna persona que haya regresado de esos países; o si se piensa que se ha estado expuesto a algún caso sospechoso o se ha tenido algún riesgo de infección. El cuestionario deberá ser cumplimentado también por los trabajadores que acudan a la próxima recarga de combustible, que es la que se llevará a cabo en la Unidad I de la central. Será el próximo día 29 cuando se desconectará de la red este reactor, pero ya antes se habrán ido incorporando operarios al día a día de la planta. En el transcurso de estos trabajos, que se prolongan durante algo más de un mes, llegarán a participar hasta 2.200 personas, algunas de ellas llegadas de otras centrales nucleares españolas o del extranjero, por lo que si la epidemia sigue yendo a más, podría complicar la ejecución de las tareas —la parada se realizará en cualquier caso, ya que es obligatoria al finalizar el ciclo del combustible.

Aparte de colocar carteles informativos en las instalaciones, como medidas profiláctica se han suspendido también los viajes internacionales de la plantilla de la central y se han limitado los efectuados dentro del territorio nacional, sustituyendo los encuentros presenciales por los de carácter telemático cuando eso sea posible.

Un poco más de margen tienen en la Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte hasta que dé inicio su periodo de mayor actividad, que comenzará entre finales de abril y principios de mayo, cuando arranque la campaña de la cereza , y que alcanzará su mayor intensidad acabando junio. Entonces puede llegarse a alcanzar los mil trabajadores —la plantilla, fundamentalmente de fijos discontinuos, ronda los 150—. Actualmente, no se desarrolla actividad productiva en sus instalaciones, pero según explica Mónica Tierno, directora general de la agrupación de cooperativas, se está «trabajando en un protocolo» con medidas preventivas e informativas para que, llegado el momento si es necesario, pueda aplicarse. También, indica Tierno, se está estudiando qué puestos podrían desempeñarse mediante teletrabajo. En cuanto a la comercialización, esgrime, si se producen restricciones de movimientos como en Italia, «obviamente eso puede tener impacto para los productos perecederos. Esperemos que la cosa vaya mejorando». Más de la mitad de su producción, se destina a la exportación.

En Deutz, comisión urgente

En Deutz, comisión urgenteLa planta que Deutz Spain tiene en Zafra para el montaje de componentes para motores es uno de los referentes industriales de Extremadura. En ella trabajan alrededor de medio millar de personas. La empresa ha creado una comisión urgente para atender la situación y actuar rápidamente en caso de que se detectase algún positivo en la plantilla. Además, «el servicio de prevención ha realizado una evaluación del riesgo de infección por covid-19 al que se expone el trabajador ante distintas situaciones laborales y, en función del nivel de riesgo evaluado, se han tomado distintas medidas preventivas que reducirían la probabilidad de contagio», explican fuentes de la compañía. Otras iniciativas tomadas han sido suspender todos los viajes de trabajo a países con riesgo de transmisión comunitaria del virus; cancelar las reuniones con personas que residan o hayan visitado recientemente estos países; reducir al mínimo los desplazamientos tanto nacionales como al extranjero; dar preferencia al transporte privado sobre el público; no acudir a eventos, ferias o congresos a no ser que sea estrictamente necesario; y cancelar las visitas a la factoría que no estuviesen ya planificadas.

Igualmente, se agrega, se ha informado a la plantilla de las medidas de higiene y otras recomendaciones a seguir, «como por ejemplo qué hacer en caso de presentar síntomas de infección respiratoria», al tiempo que se ha llamado «a la responsabilidad del trabajador que tenga previsto viajar de forma particular a países con mayor riesgo de contagio para que ponga esta situación en conocimiento del servicio de prevención».

Esta factoría no ha tenido hasta ahora dificultad alguna ni en el proceso productivo ni para la comercialización de sus productos. Tampoco en Cetarsa. «Con los suministros y exportaciones no estamos teniendo problemas», se apunta desde esta compañía, que transforma más de 23 millones de kilos de tabaco al año en sus dos fábricas extremeñas, ubicadas en Talayuela y Navalmoral de la Mata, que van a parar en su totalidad fuera de las fronteras españolas, compradas por las principales multinacionales del sector. Solo en la planta de Talayuela trabajan unos 250 operarios, de los 400 que tienen en Extremadura. Entre las medidas comprendidas en el plan de actuación que han puesto en marcha los servicios médicos y de prevención de la compañía figuran la colocación de carteles informativos en lugares estratégicos como puntos de fichaje, los servicios o los vestuarios, la disposición de geles con base de alcohol en puntos de fichaje, servicio médico y casetas de control de entrada a las fábricas; la intensificación de la limpieza en puntos críticos; o la organización interna para evitar aglomeraciones o visitas numerosas.

«Por el momento no hemos tenido problemas, pero imaginamos que en breve esto empezará a tener repercusión porque parte de las zonas que están más afectadas son clientes nuestros. Por ejemplo, Lombardía y las regiones anejas», detalla Joaquín Herreros de Tejada, director de calidad de Diam Bouchage. Esta empresa del grupo francés Oeneo cuenta con una planta de producción de tapones de corcho en la localidad pacense de San Vicente de Alcántara, que da empleo a unos 220 trabajadores. Una menor producción de vino en países como el transalpino podría derivar en una menor demanda de tapones. En cualquier caso, puntualiza, «tampoco tenemos muy claro cuál es la repercusión que tiene el cierre de Italia norte, por ejemplo, en término de transporte de mercancías. Lo que sí es evidente es que habrá una menor actividad. La realidad es que estamos esperando acontecimientos».

La empresa ha puesto en marcha «un plan de contingencia interno que está en continua revisión» para informar a los empleados y darles las recomendaciones de higiene o precaución necesarias». En lo que atañe al proceso productivo y de comercialización, añade Herreros de Tejada, «estamos tranquilizando a nuestros clientes explicándoles que nuestro suministro por el momento no se ve afectado. A día de hoy la actividad se mantiene perfectamente normal y nuestros aprovisionamientos que vienen de las ‘zonas calientes’ no son importantes, y perfectamente prescindibles». Normalidad que se mantiene, incluso, en la pequeña proporción de sus ventas que se destina el mercado chino, y que «no se ha visto muy afectada», ya que el destino al que se envía la mercancía está «relativamente lejos» de las regiones más castigadas por el virus.

Reunión en Liberbank

Reunión en LiberbankEn Liberbank se mantuvo ayer una reunión mediante videoconferencia con los representantes de los trabajadores. Según indicaron fuentes sindicales, habría cuatro casos en estudio de empleados de esta entidad, todos en la comunidad de Madrid. Serían tres sospechas por ‘contactos remotos’ y otra más considerada como «contacto estrecho». A la espera de que se establezcan oficialmente los procedimientos, se ha puesto encima de la mesa la posibilidad de ofertar teletrabajo para los empleados del banco que tienen su puesto en servicios centrales. Para los que lo tienen en la red comercial, se permitiría flexibilidad de jornada, adaptándose a las necesidades de la sucursal. «A día de hoy no tenemos ni siquiera los geles. La mayoría estamos tirando del alcohol de los botiquines. Y los tenemos pedidos desde que esto empezó. Con la de gente que va a las ventanillas y el dinero que se toca al cabo del día en las oficinas...», se lamentaba ayer un trabajador de la entidad en Cáceres.