El toro no es un bien protegido en Extremadura, al menos aún; pero sí cuenta con un firme respaldo de la Junta. De hecho, cada año la Consejería de Administración Pública ofrece subvenciones dirigidas al apoyo y fomento de actividades taurinas para "potenciar la fiesta y la cultura de los toros", reza la convocatoria. En la edición del año pasado, la Administración repartió 60.000 euros entre medio centenar de ayuntamientos, asociaciones, clubes y peñas taurinas para coloquios, exposiciones y edición de libros y revistas.

Además, la Consejería de Agricultura y el Ministerio de Medio Ambiente han puesto en marcha el programa Somos Dehesa , con el objetivo de "promover, incentivar y realizar actividades para optimizar las potencialidades del ganado bravo como factor de desarrollo en el medio rural de las zonas adehesadas". Y más concretamente, pretende "conservar y proteger el toro de lidia y su hábitat, y sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la ganadería brava para la gestión y aprovechamiento de la dehesa". Su presupuesto, 600.000 euros.

Esta consejería también ha diseñado rutas de agroturismo para atraer a visitantes a ganaderías de toro de lidia en la región.