Algunos de los vecino salieron de sus casas con lágrimas en los ojos, pero con la confianza puesta en los responsables de la operación de que volverían pronto. Y así fue, tres horas después de salir de Aldeanueva del Camino, los habitantes llegaban ilusionados a sus casas tras haber realizado con éxito los bomberos la operación de protección del tanque de propano que amenazaba con explotar.

"No temenos miedo. Creemos que no pasará nada, dicen que lo han hecho más que por otra cosa por darnos protección. Confiamos en los responsables", indicaba, Julia Domínguez, preocupada.

Por su parte, Julián Domínguez López, un trabajador que venía de regreso a su pueblo tuvo que ser desplazado hasta Hervás, también por medidas de seguridad. "Me avisaron al móvil indicándome que no podía entrar al pueblo porque una fábrica de pimiento estaba ardiendo. Yo no tenía miendo porque antes había sido torero" relataba este simpático vecino de Aldeanueva durante su corta estancia en Hervás.

La noticia también sorprendió a muchos. Algunos estudiantes de la población que residen en Hervás se quedan asombrados a ves llegar en autobuses a sus paisanos. "¿Qué ha pasado, para que estáis aquí?", preguntaban los adolescente a su vecinos a la llegada. Estos les explicaban el problema que había con el propano. Finalmente, los vecinos daban las gracias públicamente a las autoridades por la rápidez y por las medidas de seguridad que les prestaron. El exilio sólo se prolongó durante 3 horas.