El nuevo modelo de financiación autonómica, que será debatido y probablemente aprobado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebrará el próximo miércoles en Madrid, significa, grandes magnitudes, que la región va a recibir 202 millones de euros como cantidad consolidada por encima de los 3.254 millones que ha recibido este año en aplicación del modelo que ahora termina. No obstante, esa cantidad no es automática, de manera que este año recibirá 141 millones (el 70%), en el 2010, 171 millones (el 85%) y en el 2011 los 202 citados. A partir del 2012 se producirá un incremento de entre el 5 y el 8%, por lo que esa cantidad adicional oscilará entre 212 y 216 millones, en función del porcentaje de incremento que finalmente se apruebe para ese año. Esa graduación es igual para todas las comunidades autónomas.
Según los datos aportados por la Junta de Extremadura, la región, con este modelo, va a recibir un tratamiento del Estado más favorable que con el anterior, porque esa cantidad supone una mejora relativa en inversión por habitante. Si hasta ahora los fondos recibidos por Extremadura en relación a su número de habitantes era del 117%, a partir de la aprobación del nuevo modelo ese índice será del 121%. De igual modo, también ha mejorado el diferencial entre el peso de la población extremeña frente a la nacional, por un lado, y, por otro, el peso de lo que recibe Extremadura en relación a la financiación total, pasando del 0,50 en el modelo que ahora termina al 0,56 en el que ahora empieza.
Otro de los aspectos que destaca el Gobierno extremeño, y que ha sido objeto de controversia política, es el de la clasificación de la comunidades en financiación por habitante. Fernández Vara dijo en el pasado debate sobre el Estado de la Región que no admitiría una financiación que colocara a Extremadura por debajo del tercer lugar que ocupa ahora, por detrás de Cantabria y La Rioja. Pues bien, de los datos conocidos se deduce que la región seguirá siendo la tercera en ese ránking y seguirá detrás de esas dos comunidades.
El modelo que se someterá al criterio de las autonomías el próximo miércoles ha introducido variables nuevas, además de cambios en las que ya había, según había pedido Extremadura, y que pueden estar en la base de la mejora de la financiación. En este sentido, el nuevo sistema tiene en cuenta como factor de cálculo la densidad de población, que hasta ahora no contaba, al tiempo que gana peso el factor dispersión y se establece un cálculo ponderado de la población en razón de su envejecimiento. Extremadura es una de las regiones con mayor índice de personas de la cuarta edad, así como de las que tienen menor densidad de población y más dispersa, circunstancias que encarecen la prestación de los servicios.
LOS NUEVOS HABITANTES Aparte del Estatuto de Cataluña, la razón por la cual el Gobierno se ha avenido a negociar un nuevo sistema de financiación autonómica es el inesperado incremento de la población en nuestro país. En el anterior modelo no se incluía una fórmula de aumento automático de la financiación en razón del aumento del censo, de ahí que las comunidades que habían ganado más población pidieran la negociación de un nuevo sistema. Desde el 2001 al 2007, año que se toma ahora como base para el cálculo de las variables que inciden en la financiación, España ha ganado 5 millones de personas. La participación extremeña en ese aumento es testimonial: apenas 16.400 (de 1.073.600 habitantes del 2001 a 1.090.000 en el 2007). Como quiera que el nuevo modelo responde fundamentalmente a la necesidad de un nuevo cálculo a partir de esos cambios demográficos, la Junta ha estimado que el Estado va a destinar a la región 12.317 euros por cada uno de esos 16.400 nuevos extremeños. Esta cantidad triplica la financiación per cápita ordinaria, situada este año en 2.985 euros. "Mientras el aumento de población en Extremadura representa en el conjunto de España el 0,3%, lo que va a recibir Extremadura relacionado con ese aumento de población es casi el 2%", de manera que la región va a recibir como si hubiera aumentado el censo en 120.000 personas", señala la Junta.
EL VOTO AFIRMATIVO El Gobierno regional estima que las cifras "son positivas y que este sistema es mejor que el anterior". Además, el texto del acuerdo no incluye el concepto de esfuerzo fiscal que sí se incluía, debido a presiones de Cataluña, en el borrador presentado a las comunidades el pasado mes de enero. Al no incluirse el esfuerzo fiscal de los territorios en el acuerdo, la filosofía del mismo concuerda con la defendida por el Ejecutivo extremeño. Como quiera que la introducción del concepto de esfuerzo fiscal era suficiente para que el gobierno de la comunidad rechazara el acuerdo, su exclusión permite pensar que votará a favor del nuevo sistema en la reunión que el Consejo de Política Fiscal y Financiera celebre el miércoles.
