Hasta el 17 de noviembre no habrá un pronunciamiento oficial por parte del Comisario Europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, pero ya existe un borrador con las líneas básicas de cómo va a estar dirigida la Política Agrícola Común (PAC) a partir del año 2013. Y en el mismo se apuntan cuestiones ya avanzadas por el propio Ciolos en Mérida en junio, como la necesidad de garantizar a los pequeños agricultores un nivel mínimo de rentas directas, o más ayudas ligadas al medio ambiente; medidas que satisfacen tanto a la Junta de Extremadura como a los agricultores. Sin embargo, en ese borrador que se ha filtrado nada aparece sobre el presupuesto que habrá para impulsar las nuevas medidas, sobre todo teniendo en cuenta que el panorama europeo es muy distintos, con diez países más en la UE, que también recibirán ayudas. Esta es la principal preocupación de las organizaciones agrarias extremeñas, saber si, tal y como también se prometió en Mérida, la nueva PAC contará con un presupuesto fuerte que palie las posibles rebajas económicas al repartir el dinero entre más destinatarios. Otra cuestión que está clara es que desaparecen los derechos históricos; es decir, el pago a los agricultores tanto si producen o no en la actualidad, y que esos pagos directos se limitarán a los productores en activo.

Con estas líneas básicas claras, el documento de reforma contempla tres objetivos para la futura PAC: contribuir a los ingresos de los agricultores y limitar la variabilidad de la renta agraria; garantizar prácticas sostenibles de producción y fomentar una agricultura más ecológica innovando con nuevas tecnologías y productos para ayudar a controlar el cambio climático; y permitir un desarrollo territorial equilibrado, apoyando el empleo y el mantenimiento del tejido social de las zonas rurales. Y para conseguir todo ello, aclara este borrador "será necesario que se mantenga el apoyo público al sector agrario y las zonas rurales". A este respecto, señala que "una política agrícola diseñada en la UE permite un uso más eficiente de los recursos presupuestarios que la coexistencia de las políticas nacionales".

TRES OPCIONES Sobre estas consideraciones generales, la Comisión Europea de Agricultura baraja tres opciones de cara a la futura PAC. Por un lado, mantener la situación actual mejorando algunas cuestiones como una mayor equidad en la distribución de los pagos directos entre los estados miembros. Pero, esta iniciativa "podría representar una oportunidad perdida de la reforma de la PAC de convertirse en una política más eficaz y legítima para hacer frente a los retos del futuro y responder a críticas sobre el equilibrio de la ayuda", apostilla el documento.

Otra alternativa que se apunta es un apoyo "más sostenible y equilibrado", una opción "más adecuada" para tratar los desafíos económicos, ambientales y sociales.

La tercera vía que se propone es la "abolición del apoyo al mercado y a los ingresos", centrándose solo en los objetivos medioambientales y el cambio climático. Este planteamiento "permitiría una clara orientación de la política", pero "llevaría a una reducción significativa en los niveles de producción, los ingresos agrícolas y el número de agricultores de los sectores más vulnerables", además de "el abandono de tierras".

A modo de conclusión, en el borrador se asegura que la futura PAC "debe convertirse en una política más sostenible, más equilibrada, con objetivos mejor definidos, más simple y más eficaz, más responsable ante las necesidades y expectativas de la sociedad de la UE".

Con todo ello, y a la espera de ese posicionamiento el día 17 de noviembre, fuentes de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente consultadas por este periódico, afirman que oficialmente no pueden hacer ninguna valoración hasta no conocer más detalles.

Pero, extraoficialmente se muestran "contentos", ya que "se traslada mucho de lo que se transmitió desde Extremadura". Además, apuntan a esa idea de vincular mucho más las ayudas directas a cuestiones medioambientales. En todo caso, el propio consejero extremeño del ramo, Juan María Vázquez, estará en Bruselas ese día para conocer de primera mano ese pronunciamiento de la Comisión Europea de Agricultura, como representante español en esta materia.

Las organizaciones agrarias extremeñas también están a la expectativa, pero coinciden en la necesidad de contar con un presupuesto fuerte, algo que no recoge el borrador, según denuncian. "No hay presupuesto y, por tanto, el documento sale cojo, y no habría una PAC fuerte como se nos ha dicho", asegura Ignacio Huerta, secretario regional de UPA-UCE. A este respecto, considera "una barbaridad" la redistribución presupuestaria entre los países, porque "si con menos dinero hay que atender a más gente, hay un recorte presupuestario". A su juicio, debería haber una neutralidad presupuestaria en el reparto". Huertas insiste en la necesidad de un presupuesto "fuerte" para solventar problemas del campo, como son los mayores costes de producción, la especulación de precios, el cambio climático y el control de enfermedades animales.

Sin embargo, reconoce que hay aspectos positivos, como garantizar las rentas mínimas a los pequeños agricultores y las ayudas directas a los agricultores en activo, a los que producen.

Juan Moreno, presidente de Coag Extremadura, coincide con Huertas en la necesidad de contar con un presupuesto que garantice la viabilidad de las explotaciones, aunque prefiere poner en cuarentena este borrador hasta que no haya una postura oficial. En todo caso, resalta que "las ayudas no son la solución de la agricultura, la solución debe llegar vía precio; si no es así, es muy difícil garantizar la rentabilidad de la agricultura", matiza.

También cauteloso se muestra Bibiano Serrano, presidente de Apag Extremadura Asaja, pero incide en que van a desaparecer los derechos de pago único, porque "no somos capaces de explicarle a la sociedad que nos den ayudas por lo que hicimos hace diez años, cuando ahora no están en activo los mismos agricultores, sino que se dan las ayudas a los que estamos trabajando ahora", comenta. Esta organización agraria confía en las palabras del comisario europeo pronunciadas en junio en Mérida.

LA HERENCIA DE LA PAC Todo eso es el futuro, pero lo cierto es que hasta el momento 80.000 agricultores y ganaderos de la región se benefician de la PAC.

En el caso de la agricultura, ha servido para modernizar las infraestructuras agrarias y para industrializar al sector, proliferando las industrias de transformación de tomates, bodegas y almazaras, fábricas de embutidos, secaderos, mataderos, cebaderos de ganado, industrias arroceras, secaderos de cereales, fábricas de piensos, centrales hortofrutícolas, salas de despieces, queserías, y centros de tipificación.

Mientras que en la ganadería la cabaña de vacuno y ovino se ha duplicado, la de ovino es la mayor del país, y el porcino se ha colocado como principal activo económico del sector.