Nueve municipios extremeños han superado en los primeros meses de este año la tasa media nacional de delincuencia, según revela un informe elaborado por el Ministerio del Interior. El documento presentado ante el Congreso de los Diputados detalla las 862 localidades españolas que entre enero y mayo del 2004 tuvieron un volumen de infracciones penales (sumando delitos y faltas) superior a la media estatal.

En este listado --al que ha tenido acceso EL PERIODICO EXTREMADURA-- se incluyen siete municipios de la provincia de Cáceres y dos de Badajoz. En el caso cacereño, se trata de pequeñas localidades --de menos de 700 habitantes-- en las que la escasa población provoca una alta tasa de delincuencia pese a tener menos de 15 infracciones penales en cinco meses, como ocurre con Collado, que aparece como lugar peligroso con tres casos debido a sus 218 habitantes. Interior incluye también a Casas de Miravete, Jarilla, Millanes, Oliva de Plasencia, Saucedilla y Casas de Don Antonio.

Este último caso es el más llamativo. Y es que el informe del Ministerio señala a Casas de Don Antonio como el municipio extremeño con una mayor tasa de delincuencia, con 10 delitos y faltas entre enero y mayo del 2004. Esto supone una tasa de 44,64 infracciones por cada mil habitantes, una ratio que se sitúa nada menos que 26 puntos por encima de la media nacional (que es 18,91).

LAS CIUDADES Por lo que se refiere a Badajoz, el panorama es totalmente distinto, puesto que los municipios afectados son precisamente los dos más grandes de toda la provincia, es decir, Badajoz y Mérida. La capital pacense supera en cuatro puntos la tasa nacional, pero la ciudad emeritense alcanza una ratio de 28,77 infracciones por cada mil habitantes, o, lo que es lo mismo, diez puntos más que la media del país.

Sin embargo, la interpretación de estos datos, que señalan a Mérida como la ciudad con más delincuencia de la comunidad autónoma, refleja que no deben ser tomados como alarmantes. El más crítico es el máximo responsable en la región del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Sánchez Espinosa, para quien el hecho de Mérida sea la ciudad con una mayor tasa de delincuencia en Extremadura se debe a la falta de efectivos policiales y "la falta de coordinación" entre la policía local y la Policía Nacional. A esto se suma que se destinan muchos agentes a custodiar las dos comisarías que hay en la ciudad, a prestar servicios tanto a la Junta como a la Asamblea de Extremadura y a realizar escoltas en Madrid, añade.

Pese a todo, Sánchez Espinosa deja claro que la situación en Mérida "no es alarmante", puesto que la mayoría de los delitos se refieren "al tráfico de drogas a pequeña escala". Esto se debe a que la capital extremeña se ha convertido en el punto de abastecimiento de muchos toxicómanos de la comarca.

MUCHAS FALTAS Por su parte, la portavoz del Ayuntamiento de Mérida y delegada de Policía Local, Pilar Vargas, resta importancia a estas cifras porque "lo que hay en la ciudad es muchas faltas y pocos delitos". Tanto es así que "no hay atracos nocturnos y sí una sensación de seguridad". En esta línea, recordó que en la Junta Local de Seguridad de Mérida, que se celebró en julio, la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, afirmó que la delincuencia se había reducido un 20% en la ciudad, aunque reconoció un déficit del 18% (34 agentes) en la plantilla de la Policía Nacional emeritense.

Luis Ochagavía, comisario de Mérida, también es optimista a la hora de analizar los datos.

Pasa a la página siguiente