Según explica el Estatuto de Autonomía, el proceso de reforma de este texto puede ser impulsado por la Junta; la Asamblea, a propuesta de una tercera parte de sus miembros; o por las Cortes.

La propuesta de reforma requiere el apoyo de dos tercios del Parlamento regional, es decir, de 44 diputados con lo que es necesario un acuerdo entre PP y PSOE. Posteriormente necesita la aprobación de las Cortes Generales, y no está previsto un referéndum.