Al menos una veintena de alcaldes extremeños han mostrado su preocupación por la escasez de efectivos de la Guardia Civil en sus municipios, al haber sido trasladados a zonas costeras para cubrir los servicios de la denominada Operación Verano , que incluye un reforzamiento de la seguridad en las áreas de afluencia turística. Además, este año la situación se agrava, dado que el número de guardias civiles trasladados ha crecido al celebrarse el Año Xacobeo, que supone un fuerte incremento de la llegada de peregrinos a Galicia.

Según confirmaron a EL PERIODICO fuentes de la Guardia Civil, la actual Operación Verano 2004 ha movilizado a más de 46.000 agentes, de los que 28.500 pertenecen a las propias áreas donde se pretende reforzar la vigilancia, mientras otros 8.600 son de la Agrupación de Tráfico, unos 1.500 son desplazados a la costa dentro de la misma comunidad, y alrededor de 3.000 proceden de otras comunidades autónomas no incluidas en la operación, como es el caso de Extremadura.

REUNION CON EL SUBDELEGADO Esta movilización ha provocado que algunas poblaciones queden muy mermadas de efectivos e, incluso, sin guardias civiles durante el periodo veraniego.

Por ello, alcaldes de las las comarcas de La Vera y el Campo Arañuelo se reunieron a mediodía de ayer, en la pedanía talayuelana de Tiétar, con el subdelegado del Gobierno, Fernando Solís, y altos mandos de la Guardia Civil, "para mantener una primera toma de contacto" y analizar la problemática derivada de la escasez de personal, muy significativa en estas comarcas, según explicó en la tarde de ayer el presidente de la Mancomunidad Intermunicipal de La Vera, José Antonio Rodríguez.

La reunión fue solicitada tras estudiar la situación durante el penúltimo pleno celebrado por la mancomunidad, donde los ediles mostraron su preocupación porque el problema, "que existe, incluso en invierno, se agudiza en verano", por la razones apuntadas.

Esto se traduce, según los alcaldes, "en que solamente se cubren los servicios mínimos", con una patrulla durante la noche, "para los diecinueve pueblos de La Vera", que cuentan con un censo próximo a los treinta mil habitantes, "pero que en esta época del año se duplica fácilmente".

Tras el encuentro, el presidente comarcal coincidió con los alcaldes de Jaraíz, Nicasio López, y Aldeanueva de la Vera, José Antonio Gargantilla, al catalogar la reunión de ayer de positiva, "por cuanto que ha servido para que el subdelegado del Gobierno, tenga una idea exacta de la realidad de la zona", en lo que se refiere a seguridad ciudadana.

Sin embargo, y tras tomar nota de los planteamientos y peticiones formuladas por los regidores de ambas comarcas, el subdelegado habría apuntado a los ediles que "el tema de ampliación de plantilla no depende directamente de él", por lo que "trasladará el asunto a las instancias superiores que correspondan".

En la reunión de Tiétar se acordó además crear juntas de seguridad ciudadana en los pueblos donde sea necesario y no las haya, "y estrechar la colaboración, mejorando la coordinación, que ya es buena, entre las policías locales y la Guardia Civil", apuntó Nicasio López, con el fin de afrontar posibles problemas de inseguridad que puedan surgir.

EFECTIVOS DE TRAFICO Los pueblos de La Vera que cuentan con policías locales, o auxiliares de las mismas, lo que permite poner en marcha esta cooperación, son Jaraíz, Aldeanueva, Jarandilla, Losar, Villanueva y Madrigal.

Al desplazamiento de guardias a las zonas costeras, que deja en una situación precaria a muchos municipios donde la Guardia Civil es el único cuerpo de seguridad que existe, se une el traslado también de agentes de Tráfico, que dejan de patrullar por las carreteras extremeñas.

Todo ello agrava una situación de por sí precaria, puesto que la región cuenta con una plantilla teórica de 2.500 agentes, aunque según la Asociación Unificada de la Guardia Civil la realidad es que las bajas y vacantes no cubiertas dejan esta cifra en algo menos de 2.000 efectivos para todo el territorio extremeño.