Alange y Mérida son, a tenor del documento de planificación energética, las dos únicas ubicaciones que el Ministerio de Industria se plantea como posibles para la instalación de centrales de ciclo combinado. Además, en ningún caso se habla de cinco plantas, tal y como se había anunciado, sino sólo de dos. El plan destaca el protagonismo que en los próximos siete años asumirá este tipo de generación eléctrica en todo el país, aunque no ve viable que cuajen todos los planes inversores anunciados.
De hecho, el planteamiento que hace Industria a la hora de ver qué inversiones en la red de gasoductos deben hacerse para responder a la demanda de estas centrales marca un horizonte de menos de 30.000 megavatios de producción, cuando se anunciaba justo el doble.
En Extremadura, la perspectiva es que habrá que reforzar algo los gasoductos de Alange y Mérida, donde se instalarían dos centrales, cada una con 800 megavatios.
De este modo, la potencia instalada se incrementaría en la región en 1.600 megavatios en lo que a energía en régimen ordinario --nuclear, ciclo combinado, hidráulico, fuel y carbón-- se refiere.
Y es que el ministerio se ha marcado como un objetivo la corrección del desequilibrio entre generación y demanda, "que obliga a transportar la energía desde las zonas excedentarias a las deficitarias". Ello supone pérdidas energéticas "además de obligar a realizar inversiones en redes que soporten estos flujos de energía".
Por ello, se han declarado como áreas preferente para la instalación de ciclos combinados las zonas sur y este peninsulares, en concreto las zonas de Cádiz, Huelva, Cartagena, Sagunto y Barcelona.
Extremadura se localiza como región de baja preferencia a la hora de instalar ciclos combinados y, en general, cualquier sistema nuevo de generación de electricidad.
Y ello pese a que se indica que en la Comunidad Extremeña existen solicitudes para instalar 3.214 megavatios, sobre un total de 98.500 megavatios en todo el país y que hay cinco centrales de ciclo combinado en trámite de estudio ambiental para instalarse en la región.
Parques eólicos
Aquí industria mete la tijera, y dice que de 3.214 megavatios para Extremadura, nada, que el incremento que prevé hasta el 2011 en generación eléctrica es de poco más de 2.000 megavatios entre energía de régimen ordinario y la de régimen especial, es decir, a partir de fuentes renovables.
El apartado específico para las renovables también recorta las previsiones extremeñas. Así, se indica que el aumento de potencia instalada hasta el 2011 será de 481 megavatios.
Además, se manifiesta en el documento que la previsión de potencia de origen eólico instalada en Extremadura dentro de siete años será de 400 megavatios, lo que equivale a unos 15 parques, que irían preferentemente en la zona norte cacereña, según la previsión de líneas de evacuación.
En este sentido, el ministerio matiza que no es admisible para el sistema una masiva incorporación de molinillos al sistema eléctrico, puesto que se trata de una fuente con fuertes oscilaciones, por lo que limita a 20.000 megavatios el total de potencia instalada en España.
En cuanto a la solar en sus dos versiones --termoeléctrica y fotovoltaica-- se da para toda España una previsión de potencia instalada de 900 megavatios, y los cálculos para Extremadura serían de una participación de en torno a 80 megavatios.
