Domingo está buscando trabajo. Acabó en junio y desde entones no ha parado de remitir currículos, asistir a entrevistas y realizar cursos. Pero de momento no ha tenido mucha suerte. No ha encontrado nada a pesar de contar con el mejor expediente académico de su promoción en la Licenciatura de Ciencias Actuariales.

Jaraiceño de 24 años, reconoce que el acceso al mercado laboral en su ámbito es complicado. "Tienes que tener una gran formación. Las exigencias son altas, con un nivel muy alto en idiomas y programación", explica, no sin reconocer que la suya no es una profesión muy saturada. "Hay pocos actuarios, pero también hay pocas empresas, porque nosotros trabajamos con las aseguradoras a alto nivel y eso solo se hace en sus sedes".

Por eso sabe que su futuro pasa por ir a Madrid, Sevilla o Barcelona: "Tendré que irme fuera", aunque de momento no descarta aceptar algún trabajo aquí en el sector de la banca. "No es lo mío, pero mientras cumplo mis expectativas, podría aceptar alguna oferta si es buena", afirma antes de salir de casa para asisitir al curso de inglés empresarial que está realizando.