En un escenario de crisis abrumadora, hemos creído necesario reforzar el diálogo social para frenar la caída del empleo y poner énfasis en el mantenimiento de la actividad empresarial". En estos términos se expresaron el secretario general de la Confederación Regional de Empresarios (CREEx), Juan Manuel Arribas, y los secretarios generales de UGT y CCOO de Extremadura, Francisco Capilla y Julián Carretero, respectivamente.

Lo hicieron tras la firma de un acuerdo que presentaron, ayer en Badajoz, en forma de 'Declaración de los agentes sociales y económicos: compromiso por el empleo y la economía'. De este modo escenificaron la capacidad de acción de los agentes sociales, de ponerse de acuerdo cuando la situación lo requiere y expresar el sentir de la sociedad civil en cuanto al emprendimiento y a la defensa de la relación entre trabajo y empresa.

"Estamos dispuestos a sacrificar lo que sea necesario en aras de que el empleo que queda en Extremadura se mantenga y no desaparezca", afirmó Capilla, en lo que junto con Arribas y Carretero consideraron "un ejercicio de autorregulación, de responsabilidad, legitimidad y valentía", destinado también a la defensa de la economía productiva por parte tanto de las empresas como de los trabajadores.

Para ello, consideraron como "una herramienta de primer orden" y una "palanca para salir de esta situación tan complicada" el diálogo social, culminar la negociación colectiva y cerrar los convenios pendientes, señalaron los representantes de la patronal y los sindicatos.

INVITACION A LA JUNTA Estos invitaron al gobierno de la Junta de Extremadura y demás fuerzas políticas a que se adhieran al compromiso y a su aplicación a través de la acción política y en el marco de su competencia laboral.

Para Arribas, se debe "flexibilizar en lo posible la regulación normativa y tener un tejido empresarial competitivo" en el contexto de "una gravísima crisis internacional, a cuyas repercusiones no es ajena Extremadura", manifestó. Carretero recordó que "hasta ahora, algunas de las medidas adoptadas no han parado la caída del empleo, que es insostenible y que puede seguir si no se toman medidas de choque".

También alertaron los firmantes de la declaración que "día a día sigue la caída de la demanda y las dificultades de las empresas por falta de dinero circulante", y por eso "nos toca hacer un ejercicio de responsabilidad para paliar sus efectos en la región". Y, también, para hacer todo lo posible para que no siga cayendo el empleo, "pues en los últimos meses se han perdido 14.000 puestos de trabajo", señaló Francisco Capilla.

UN PASO ADELANTE "Damos un paso adelante en nuestro compromiso sin ambages para responder a un clamor social y en interés propio y el general, con todo rigor", afirmó Carretero. Y añadió que los interlocutores llevan un mes trabajando en la declaración, para plasmar los objetivos de la misma y "dar un mensaje a la sociedad y a los ámbitos político y gubernamental, pues somos parte de la solución y no del problema".

La declaración dice que asistimos "a una caída continuada de la actividad económica con un crecimiento del desempleo que está alcanzando cifras inaceptables y las empresas por diversas razones, entre ellas la caída de la demanda y el escaso dinero circulante, tienen serias dificultades de supervivencia".

Señala aspectos negativos como el insuficiente dinamismo de la economía extremeña, la baja tasa de actividad, el alto desempleo, la composición poblacional y el deterioro del tejido productivo, que se han agudizado con la situación económica de los últimos años y que se encienden las alarmas ante un repunte del desempleo y una inflexión de la tímida recuperación económica.

MEJORA COMPETITIVA Se incide también en que la mejora de la posición competitiva precisa de la contención salarial, que debe estar acompañada de la contención de precios, todo ello vinculado a acuerdos plurianuales que verifiquen los resultados. Y en evitar que las actuales dificultades "redunden en mayores desigualdades" entre hombres y mujeres en el ámbito laboral.

Arribas, Capilla y Carretero consideraron "imprescindible que los agentes sociales y económicos alcancemos acuerdos afines a la estrategia del Pacto por la Formación Profesional o el Pacto Social", mediante la constitución de una mesa de diálogo social "bipartita, poniendo en valor la formación profesional".

Por otra parte, los agentes sociales constataron que los altos niveles de economía irregular existentes se han incrementado con la situación económica actual.

Por ello, consideran necesario "una actitud decidida frente a esas actividades ilegales, contraproducentes para la economía, insolidarias, que ahondan en la competencia empresarial desleal y que deterioran las condiciones de trabajo".

Ante esta situación de incertidumbre, "de cambios difíciles de prever en cuanto a la manifestación y profundidad de los mismos", la patronal y los sindicatos evidencian la necesidad de establecer contactos permanentes y mantenerlos en el tiempo. La idea es analizar "de modo sistemático la evolución de la situación, evaluar los efectos de las iniciativas en marcha y adoptar nuevos compromisos ante nuevas circunstancias". Y ello, siguiendo la hoja de ruta consensuada en el Pacto social y político de Extremadura".