El subsidio agrario que perciben los jornaleros extremeños apenas supone el 10% de lo que la UE concede a Extremadura en ayudas de la Política Agraria Común. Así, los 29.600 beneficiarios de este subsidio perciben mensualmente una media de 348 euros durante seis meses, lo que supone un total anual de 2.091 euros. Es decir, todos los perceptores de esta prestación suponen un coste para las arcas del Estado de 57,7 millones de euros por año, frente a los 541 millones de euros que se distribuyen en ayudas a las explotaciones agrícolas de la región.

Además, y si bien es cierto que al coste del PER hay que sumar otros 62,5 millones de euros por año que se emplea en las obras de interés municipal destinadas a que los jornaleros cubran el cupo mínimo de 35 peonadas para acceder al subsidio agrario, también lo es que los eventuales del campo extremeño devuelven anualmente más de 22 millones de euros en concepto de cotizaciones a la Seguridad Social para tener derecho a una pensión mínima de jubilación, abonando mensualmente en torno a 62 euros del denominado sello .

Este coste conjunto de las prestaciones es el que ha llevado a los sindicatos a reiterar que "no existen razones ni económicas ni mucho menos sociales, que justifiquen la actual liquidación del sistema de protección", según señaló Valentín García, secretario regional de CCOO.

PUGNA ZAPLANA-RATO

Por otro lado, el diario económico Cinco Días ha apuntado que el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, mostró a los dirigentes nacionales de CCOO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez, su disposición a contemplar la posibilidad de restituir el PER como estaba antes de la reforma laboral por un periodo transitorio, de entre seis meses y un año, mientras se negocia un nuevo modelo de prestación. A cambio, la huelga sería desconvocada.

Según este mismo diario, Zaplana habría transmitido esta posibilidad al presidente del Gobierno, José María Aznar, quien le remitió al ministro de Economía, Rodrigo Rato.

Este último sería el que habría cortado cualquier opción en este sentido, en un encuentro entre ambos ministros el pasado 3 de enero, en el que Rato apuntó que rectificar también en este punto, el único vigente de la reforma laboral de mayo pasado, tendría un alto coste político para el Ejecutivo, al dar la sensación de que la huelga general consiguió todos sus objetivos.

El dirigente extremeño de CCOO se mostró muy escéptico sobre esta versión de lo ocurrido, comentando que "quien toma todas las decisiones, y también ésta, es Aznar".

Valentín García reconoció, sin embargo, que la prórroga del actual sistema había sido contemplada por Zaplana, quien la desechó de manera definitiva el pasado 4 de enero.

En todo caso, recordó que desde el primer momento los sindicatos habían planteado al Gobierno esta opción: restituir el PER, y comenzar a negociar "como se ha hecho siempre".

Sin embargo, el Gobierno "nunca ha estado por la labor, y eso es una postura colegiada, no de un ministro", por lo que el secretario regional de CCOO comentó que "aquí no se puede entrar en el juego de que Zaplana es el bueno y Rato el malo".

Por lo que se refiere a la propuesta que anunció el ministro de Trabajo, García indicó que "a Eduardo Zaplana se le acaba el tiempo, y tiene que presentar un texto la próxima semana", aunque insistió en que la restitución del subsidio es una condición previa para negociar.

Por su parte, el consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías, señaló que su Gobierno se teme lo peor, y augura que la propuesta "tendrá trampas" por la presión de otros miembros del Ejecutivo central.

Mientras, El ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, se mostró convencido de que "al final" habrá acuerdo, puesto que, a su juicio, "estamos hablando de que los que reciben el subsidio agrario lo mantienen y de que los que se incorporan van a tener la misma cuantía, con la única novedad de la disponibilidad para el mercado de trabajo o para obtener formación para tener nuevos horizontes en el mercado laboral", y ratificó el compromiso de presentar el documento en una semana.