Desde la reforma de la Ley de Tráfico del año 2014 es el conductor el que debe hacer frente a los daños ocasionados por la colisión con un animal, aunque hay opciones para incluir estos daños en el seguro del vehículo. En los seguros a todo riesgo, la cobertura tiene incluida este tipo de situaciones, pero no sucede así el caso de las coberturas más básicas (los daños a terceros), lo que supone que ante una colisión con un animal será el conductor el que deba hacerse cargo de costear todos los daños que se originen. «Depende mucho del tipo de uso que se le vaya a dar al coche, pero siempre es recomendable incluir en la póliza este tipo de coberturas en Extremadura», valora Juan José Martín Palomino, que dirige una correduría de seguros en Cáceres. Y la cuestión es que pocos lo hacen y en la mayoría de los casos que sí se interesan es «porque ya han tenido, ellos o alguien de su entorno, una mala experiencia con algún animal que se les ha cruzado en la carretera», reconoce.

33 Para que la cobertura se haga efectiva en esos casos, el único requisito imprescindible es que debe existir un atestado (de la Policía o la Guardia Civil), para que quede constancia del siniestro (no en todos los casos se cubren los daños por otros animales como perros ).