Estados Unidos se apresuró ayer a ofrecer ayuda a España para encontrar a los autores de los atentados de Madrid. "Asistiremos al Gobierno español en cualquier manera que podamos para encontrar a los responsables de estos actos atroces y llevarlos ante la justicia", aseguró el secretario de Estado, Colin Powell. El jefe de la diplomacia estadounidense hizo estas declaraciones antes de que Al Qaeda reivindicara los ataques.

La Administración republicana "se mantendrá firme con España en la lucha contra el terrorismo en todas sus formas y contra la particular amenaza a la que hace frente España por el mal que supone el terrorismo de ETA", señaló en un comunicado difundido por el Departamento de Estado.

SIN PRETEXTO POLITICO En esa declaración, hecha a primera hora de la mañana en Washington, Powell "condenó con vehemencia los indignantes y espantosos ataques terroristas de Madrid" y, en otra alusión a la organización terrorista vasca, el secretario de Estado añadió que "ningún pretexto político puede justificar el asesinato premeditado de inocentes".

El jefe de la diplomacia estadounidense explicó también que había llamado a la ministra española de Exteriores, Ana Palacio, con quien además le une una gran amistad, para ofrecer sus "más profundas condolencias a las familias de las víctimas y al pueblo de España"

Paralelamente a estas declaraciones políticas, algunos analistas citados por la prensa estadounidense, no ocultaban sus dudas de que los atentados de Madrid fueran obra de ETA. Para estas fuentes, los sangrientos ataques del 11-M estaban marcados con las señas de identidad de Al Qaeda. También en medios diplomáticos de las Naciones Unidas se discutió si debía culparse de entrada a ETA por la autoría de unos ataques sin que mediase investigación.