Tras cuatro meses y una semana en misión de paz en Líbano, el primer grupo de soldados del acuartelamiento de Bótoa aterrizó ayer pocos minutos después de las ocho de la mañana en la Base Aérea de Talavera. En este primer vuelo, con el que se inicia el relevo de las tropas extremeñas en el país asiático, llegaron 158 militares (157 del cuartel pacense y uno de Torrejón de Ardoz), que protagonizaron un emotivo reencuentro con los cientos de familiares y amigos que los esperaban. En la pista fueron recibidos por el jefe accidental de la Brigada Extremadura XI, Jesús de Miguel Sebastián, y por el coronel jefe de la Base de Talavera, Guillermo Vayá.

La misión de los soldados extremeños se ha desarrollado en un clima "de calma", según afirmó tras descender del avión el comandante Miguel López de Lerma, quien reconoció que salvo "algún que otro sobresalto, la situación ha permanecido tranquila" desde su llegada a Marjayún --sureste libanés-- el pasado noviembre. En este sentido, explicó que el principal riesgo para las tropas extremeñas ha sido el deficitario estado de las vías de comunicación a causa de los innumerables conflictos que ha vivido el país. "Las patrullas estaban continuamente fuera y el problema eran los accidentes de tráfico". No obstante, en estos cuatro meses los soldados extremeños no han sufrido percances de gravedad "solo incidentes menores sin daños importantes".

López de Lerma recordó que la misión del contingente español --formado por 1.100 militares, de ellos 700 de Bótoa, integrados en la Brigada Multinacional Este de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (Finul), bajo el mando del general Casimiro Sanjuán-- ha consistido en apoyar al ejército libanés y comprobar el cese de las hostilidades entre Israel y Líbano. Además, los militares han colaborado durante estos meses en varios proyectos sociales como la rehabilitación de un centro juvenil ortodoxo, la creación de un centro social hispano-libanés en Bouj Molouke o la entrega de material informático en la pequeña población de El Khiam.

El comandante destacó en su intervención que las tropas extremeñas regresan a casa con la sensación de haber cumplido con la tarea que se les encomendó y alabó el esfuerzo y dedicación de los militares extremeños en el país asiático.

El resto del contingente extremeño, que será relevado por la Brigada de la Legión de Almería, regresará en tres vuelos previstos para el próximo sábado y los días 1 y 3 de abril. Aunque aún no se ha decidido cuándo viajará el coronel Sanjuán, fuentes militares apuntaron ayer que problablemente regresará en el "penúltimo o último vuelo".