Una de las novedades introducidas por la Guardia Civil a partir de este año será la actual normativa en cuanto a la asignación de complementos de productividad para establecer "criterios más objetivos y equitativos" en el reparto. No es de extrañar si se tiene en cuenta que en el único pago que se llegó a realizar en el 2005 las diferencias entre lo percibido por unos y otros agentes llegó a los 600 euros.

Según denuncia la Asociación Unificada de la Guardia Civil (Augc), el problema es que --al menos hasta ahora-- son los que mandan los subsectores los que proponen quiénes deben cobrar estos pluses, un listado que debe ratificar el jefe del sector.

Augc asegura que en la región los responsables de este reparto no han seguido las directrices de la DGT.

En el caso de Cáceres el responsable del subsector hizo una propuesta de distribución que los agentes consideraron "justa" pero que, según Augc, habría sido modificada por el jefe de sector para introducir "otros elementos arbitrarios". En Badajoz ocurrió así desde el principio, puesto que "se ha penalizado los que han puesto menos multas --por la huelga de bolis caídos -- y hay más dinero para los que trabajan en las oficinas que para los que están en la carretera".