El sector tabaquero italiano se manifestó ayer en las calles de Roma para exigir a su Gobierno una apuesta firme por la continuidad del sector y los 60.000 puestos de trabajo que dependen de él. Concretamente, lo que los productores piden al ejecutivo de Silvio Berlusconi es que el viernes presente a Bruselas una nueva propuesta con ayudas al sector, ya que consideran insuficientes los fondos que recibirán a través del artículo 214 de los planes de desarrollo rural. Para compensarlo, el sector demanda que las ayudas agroambientales alcancen los 2.600 euros por hectárea, una cantidad muy por encima de los 1.400 propuestos inicialmente por la Junta de Extremadura y el Gobierno español en el borrador que presentaron a la Comisión Europea el pasado verano, y tres veces superior a la que figura en el texto aprobado (850 euros).

De momento España es el único país de la Unión Europea productor de tabaco que ha presentado su programa de ayudas al sector. Esta será la primera campaña de producción sin fondos comunitarios ligados a la producción. A partir de este año, el 50% del dinero que se venía dedicando al cultivo se destinará a desarrollo rural. Pese a ello, los gobiernos están intentando que esta partida revierta en inversiones al sector mediante los planes agrícolas de desarrollo rural.