LOS REGALOS

Benedicto XVI, el primer papa en cruzar la Puerta de Alcalá, otrora icono de la izquierda, recibió emocionado las llaves de una de las ciudades más secularizadas de Europa. Ratzinger también obtuvo tres simbólicos regalos: pan, sal y guirnaldas.

EL RECIBIMIENTO

El Pontífice fue recibido por el público en Cibeles con gritos, música y batir de brazos. Los gestos de los seguidores del Papa emularon a los que se suelen prodigar a las estrellas en los conciertos de rock.

LA ESPERA

Hasta 15 horas llevabanen la plaza un grupo de mexicanas que confiaban en poder contemplar al Papa de cerca. "Estoy emocionada", decía llorando una de las peregrinas, Marcela.