El Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga la muerte de una burra en Torreorgaz, muerta, según la denuncia de sus propietarios, por el maltrato al que le sometieron los quintos del pueblo durante una noche de fiesta.

Según informa la agencia Efe de fuentes de la Delegación del Gobierno en Extremadura, el informe veterinario que maneja el Seprona recoge que la muerte del animal se produjo por un infarto. El documento no entra, por ejemplo, en algunos de los aspectos que se han denunciado ante la Guardia Civil, como que los quintos le introdujeron un palo por el recto.

Los agentes han identificado a varios menores a los que aún no han tomado declaración, y, de momento, se les culpa de una presunta falta penal por daños, debido a varios destrozos que supuestamente hicieron por el pueblo.

Reunión en el ayuntamiento

Minutos antes de las dos de la tarde ha finalizado una reunión en el ayuntamiento de esta localidad de unos 1.750 vecinos, en la que ha participado la alcaldesa del pueblo, María Concepción Polo, los quintos y sus padres, quienes piden disculpas por lo ocurrido "asumiendo en todo momento la responsabilidad que les pudiera corresponder".

El ayuntamiento, por su parte, muestra su más "enérgica repulsa ante este acto de salvajismo y crueldad animal" y anuncia que "no dudará en tomar las medidas más enérgicas para que hechos tan lamentables no se repitan jamás".