Los ´indignados´ siguieron ayer su protesta en las principales plazas de la región como Cáceres, Mérida y Badajoz, a pesar de que la Junta Electoral Central había prohibido la noche anterior cualquier tipo de manifestación que entorpeciera la jornada de reflexión. Llevan ya tres días, pero ayer el Movimiento 15-M se extendió incluso a algunos municipios como Don Benito y Coria. Su interés no es otro que reivindicar otro sistema político y conseguir que esos líderes se esmeren en hacer caso a quien más lo necesita. Están en contra del bipartidismo pero todos invitan a ir a las urnas hoy, por lo que no se sabe cómo afectará este nuevo movimiento en los resultados electorales de hoy. Esa será la gran incógnita de esta jornada.

La protesta continuará hoy en todas las localidades, pero no será hasta esta noche cuando se celebre la asamblea en la que se decidirá si las concentraciones seguirán mañana. La nota característica del día fue la diversión. De hecho, en Cáceres llegaron a llamar a la concentración Jornadas de reflexión y diversión . Según comentaron desde la organización la de ayer, más que una protesta, era "una reunión entre amigos". Una reunión en la que se concentraron más curiosos que manifestantes --por la mañana no sumaban la veintena (todos jóvenes) aunque a medida que fue cayendo la tarde la plaza comenzó a llenarse--.

Y es que los indignados cacereños si algo hicieron fue divertirse y entretener a los ciudadanos. En los soportales de la plaza situados junto a las escaleras del Arco de la Estrella se hacinaban toldos a modo de tenderete, bajo los que se encontraban colchones para quien quisiera descansar. Y a lo largo de toda la explanada colgaban carleteles en los que podía leerese: "Declaramos el estado de felicidad permanente", "olvidad todo lo que habéis aprendido y empezad a soñar" o "usad protector solar, vamos a tener sol para rato". Mientras tanto algunos voluntarios celebraban talleres de percusión, papiroflexia, maquillaje, risoterapia, globoflexia y malabares. Y de fondo los chistes del humorista cacereño, Cabuvy, y el sonido de cajas flamencas y timbales.

En Mérida

En el caso de Mérida la situación fue parecida. Ayer pasaron al raso unas 40 personas. Con menos afluencia que en jornadas anteriores, en torno a las 20.00 horas comenzaron a reunirse en la plaza de España, lugar elegido en la capital extremeña para expresar su descontento con el actual sistema democrático. Media hora más tarde, un centenar de personas celebraron un minuto de silencio por "la muerte de la democracia". Mientras tanto, aumenta el número de mensajes escritos en cartulinas colocadas en la fachada del Palacio de la China o junto a la fuente del centro de la plaza.

Lemas como "Aquí estamos reflexionado" o "Ahora que hemos tomado la calle, vamos a tomar la palabra", se incorporaron a los ya existentes.

Las concentraciones en Mérida, y las acampadas nocturnas están transcurriendo sin incidentes. Los manifestantes han acordado con los servicios municipales de limpieza los lugares que pueden ocupar para echar al suelo las mantas y los sacos que utilizan para dormir, pues cada noche se baldea la plaza de España. También la Policía Local les ha comunicado que no duden en llamarles si a lo largo de la noche son increpados por algún viandante, aunque por el momento no se ha dado el caso.

Para hoy no hay convocado ningún acto por parte del movimiento, aunque ya para mañana han quedado a las ocho y media de la tarde para comenzar a organizarse con el fin de continuar exigiendo sus pretensiones más allá de la cita electoral.

En Badajoz

"Badajoz resiste" son las dos palabras que resumen el ambiente de la avenida de Huelva, donde permanece el campamento de los indignados , que en la asamblea de anoche llegaron a sumar más de quinientos, de todas las edades, en su mayoría jóvenes. Tras la asamblea decidirían quiénes iban a permanecer toda la noche en el bulevar, pues había quien llevaba ya 72 horas al frente y necesitaba descanso. Su intención, según contó Israel Méndez, era continuar toda la jornada de hoy y, a partir de este día, seguir las directrices "de Madrid".

El viernes, unas 50 personas pasaron la noche a la intemperie aunque hubo momentos en la madrugada que llegaron al centenar. En Mérida son ayudados por una panadera que les sirve el pan gratuitamente y también por una copistería que les suministra las fotocopias y octavillas. Además, otras personas les llevan toldos, comida y helados. Mientras tanto ellos realizaban encuestas para conocer a qué edad encontraron su primer trabajo, cuánto tardarán en pagar la hipoteca o cuándo tuvieron a su primer hijo.

Todos, los de Mérida, Badajoz, Cáceres, Don Benito, Coria,... ayer estaban convencidos de que no entraban en conflicto con la jornada de reflexión, porque su mensaje no era a quién hay que votar sino reivindicar valores y derechos que van más allá de los partidos políticos. Y es que, la jornada de reflexión de este 22-M o 15-M ha sido la más divertida y reflexiva de la historia de la democracia española.