El Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) considera negativos los efectos que tendría en Extremadura la aprobación por el Gobierno de la oferta pública de adquisición (OPA) que ha realizado Gas Natural sobre la eléctrica Endesa. El órgano encargado de velar por el libre mercado y la competencia afirma en su dictamen enviado al Ministerio de Economía y Hacienda con fecha 5 de enero que la fusión de ambas compañías sería "especialmente preocupante" en el sector de la distribución de gas natural en la región, ya que la entidad resultante pasaría a controlar el 98,79% del negocio. Esta situación de casi monopolio podría resultar perjudicial para el consumidor.
Endesa está presente en el mercado extremeño del gas a través de Gas Extremadura, donde posee el 47% del accionariado, lo que le otorga una posición dominante en la empresa. Gas Extremadura, según datos recogidos en el dictamen del TDC, controla el 85,95% de la distribución de gas en la región, mientras que Gas Natural tiene el 12,84% y Gas y Servicios de Mérida (Gasmer) controla el 1,21% restante. Dictamina el tribunal que con la compra de Endesa la posición de Gas Natural "se verá reforzada con riesgo para el mantenimiento de la competencia efectiva" al sumarse las redes de distribución de gas de las dos compañías. Ahora ambas compiten en cinco mercados --Comunidad Valenciana, Andalucía, Castilla y León, Extremadura y Aragón--, pero es en éstas dos últimas donde la fusión sería más restrictiva para el libre mercado.
El TDC considera de "interés económico" la presencia de varios distribuidores de gas en determinadas zonas. "La desaparición de Endesa de la actividad de distribución elimina un agente efectivo en aquellos mercados en los que Endesa ya está presente", afirma el TDC en su dictamen, que añade además que la OPA dificultaría "una posible competencia referencial en diversas zonas geográficas en las que Endesa, aun no teniendo actividad en la actualidad, podría estarlo en el futuro".
Gas Natural es el líder en distribución de gas natural en España. Parte con una "posición dominante" en la mayoría de las comunidades autonómas en las que tiene actividad, a excepción de Extremadura (donde el líder es Endesa) y País Vasco (donde tiene un puesto de dominio Naturcorp). Sólo en estas dos comunidades Gas Natural tiene menos del 60% del mercado y en 11 regiones controla más del 97%. En total, en España distribuye el 85% gas que se consume.
El pleno del TDC desaconsejó al Gobierno que diera luz verde a la operación "teniendo en cuenta los efectos sobre la competencia que podría causar" la misma. "El Tribunal considera que los efectos de conglomerado de la operación alteran gravemente la dinámica competitiva existente actualmente en los mercado de gas y electricidad", sostiene este órgano en una de sus conclusiones. El dictamen se aprobó por mayoría del pleno pero hubo tres miembros --el presidente y dos vocales-- que son partidiarios de autorizar la operación siempre y cuando el grupo resultante se comprometa a desprenderse de una serie de activos para que no se produzca un abuso de posición de dominio en determinados mercados.
MERCADO ELECTRICO Con respecto al mercado de la electricidad, los efectos de la operación tendrían mucha menor dimensión en Extremadura, ya que Gas Natural --siempre según los datos del TDC, que toma como fuente al Ministerio de Industria-- cuenta con menos de 1.000 clientes en la región, una cifra casi irrelevante en un mercado que está integrado por 594.000 abonados. Endesa distribuye en la región el 53,3% de la electricidad que se consume, pese a que cuenta con 38,4% de los abonados de la comunidad (228.000). La suma del negocio eléctrico de Gas Natural apenas aportaría mil clientes a esta cifra, con lo que no se vería incrementado sensiblemente la cuota de mercado de la compañía resultante. Pero a pesar de ello, el TDC recuerda que "la desaparición de Gas Natural de la actividad de distribución elimina un agente efectivo en aquellos mercados en los que Gas Natural ya está presente".
