Extremadura cuenta desde ayer con un nuevo hemiciclo parlamentario "más moderno y funcional", un proyecto impulsado hace cinco años por el hoy expresidente de la Asamblea, Manuel Veiga. Es un edificio de 2.000 metros cuadrados que convierte cada escaño en "una oficina abierta al mundo" dotada de acceso a internet, altavoz y voto electrónico.

Tras más de dos años de trabajos ininterrumpidos ayer fue inaugurado en Mérida el nuevo hemiciclo extremeño. El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, explicó que se trata "de un edificio para trabajar" en un momento "en el que hace falta entrar en el futuro". Así, debe ser un instrumento "para un pueblo --el extremeño-- que ya es mayor de edad".

A su juicio, una vez que ya se cuenta con una buenas infraestructuras "ahora hace falta que el contenido sea bueno". En este sentido, animó a todos los diputados extremeños "a no emplear expresiones que pueden crear efectos perversos".

CORTESIA PARLAMENTARIA

Rodríguez Ibarra se mostró partidario de que el nuevo hemiciclo dé "un nuevo impulso" al trabajo parlamentario, y que éste destaque "porque haya cada vez más cortesía entre nosotros".

Por otra parte, el presidente regional hizo referencia a los problemas que están surgiendo con los nacionalistas, y dejó claro que mientras la región ya es madura hay otras comunidades "inmaduras" que "amenazan" a su padre --el Estado-- "con irse de casa". En su opinión, ante esto "hay que tener la puerta de casa cerrada para que los inmaduros maduren y se den cuenta de que dentro se está muy calentito". Y que sepan, añadió, que "fuera de casa hace mucho frío".

"Según el presidente del Parlamento extremeño, Federico Suárez, se trata de un edificio que está "a la vanguardia nacional", ya que entre otras cosas incorpora por primera vez pantallas de plasma para ser utilizadas durante el debate parlamentario.

Por su parte, Manuel Veiga calificó la inauguración como "un paso más" en el desarrollo de la Autonomía extremeña.