Sin unanimidad entre los profesionales sobre la idoneidad de parir en casa, los datos están ahí. Según un estudio que analiza 500.000 nacimientos en países desarrollados de Estados Unidos y Europa, dar luz en casa supone un riesgo mayor para el recién nacido que si el parto se atiende en un hospital. Concretamente, se producen el doble de muertes en el hogar que en el centro hospitalarios. Son algunas de las conclusiones de un análisis de diferentes informes que indica que de cada 1.000 alumbramientos domésticos fallecen dos recién nacidos; mientras que se registra menos de un fallecido por cada millar de partos en hospitales.

Estos datos publicados en una revista de referencia para los ginecólogos, American Journal of Obstetrics and Ginecology contrastan con otros estudios anteriores que señalan que no hay evidencia alguna para determinar tal conclusión, que sí señalan claros beneficios para la madre al dar a luz en casa. Uno de los últimos trabajos realizados en Holanda, donde el 28% de los partos se realizan en el hogar, registra la mayor tasa de mortandad perinatal, con 10 de cada 1.000 bebés fallecidos, recuerda el doctor Manuel Daza, ginecólogo del Hospital de Mérida.

Entre las principales causas de mortalidad, el análisis detalla fallos respiratorios y problemas de reanimación. Añade Daza a estas causas el bajo peso del bebé, casos de depresión, o las patologías que no se han detectado en ecografías, como pueden ser soplos. "Hemos visto gestantes que aparentemente tenían un embarazo de bajo riesgo y cuando la criatura ha empezado a respirar se han manifestado alguna mínima patología", destaca. Y es que entre el 5% y el 10% de los nacidos requieren urgencia inmediata.

Por ello, Daza cree que hay que ser prudentes. "Es muy triste que se produzcan estas situaciones porque estamos ahí para que no ocurran", asegura Daza, al tiempo que ratifica que "es cierto que hemos perdido ese trato de humanidad que se busca con el parto en casa y que debería rodear a todo proceso médico, pero la sociedad, la tecnología, la responsabilidad y la falta de recursos limitan este trato", explica.