Para entender la importancia que tiene el sector del tabaco en Extremadura basta con conocer algunos datos. En la región hay actualmente más de 3.900 explotaciones agrarias que están dedicadas a la producción de tabaco y que se concentran principalmente en el norte extremeño.
Las explotaciones están mayoritariamente en las comarcas de Navalmoral de la Mata, Jaraíz de la Vera, Plasencia y Coria, aunque también hay producciones minoritarias en Hervás, Trujillo y el municipio pacense de Don Benito.
Esas fincas ocupan cerca de 14.000 hectáreas y algunos expertos aseguran que unas 30.000 familias extremeñas dependen, directa o indirectamente, de este cultivo.
El cultivo del tabaco inyecta en el norte de Cáceres cada año entre 115 y 120 millones de euros, según las cifras que maneja el sector.
Esta cantidad posibilita que no sólo vivan de este cultivo las más de 3.900 familias cultivadoras, sino un elevado número de pequeñas empresas satélite del sector, que también subsisten gracias a que el dinero que se mueve circula en la zona todo el año.
El 80% del tabaco en rama que se produce en España procede de la comunidad extremeña. En la región existen cerca de 5.000 secaderos para el cultivo.
Las ayudas europeas suponen en torno a 120 millones de euros, lo que significa el 80% de la renta global de los cultivadores.
Un estudio de valoración de la incidencia del tabaco en el empleo indica que las diversas labores relacionadas con el cultivo en la región equivalen a tener contratados 5.578 trabajadores fijos.
